La embajadora de Estados Unidos en El Salvador, Mari Carmen Aponte, dijo que hay preocupación por parte del país del norte sobre la supuesta fuga de información confidencial del Departamento del Tesoro.
La funcionaria se refirió al caso relacionado al donativo de $10 millones hechos por Taiwán a El Salvador que hizo público el presidente Mauricio Funes.
Aponte dijo que la oficina investiga el hecho por ser “temas de extrema confidencialidad” pues “cualquier fuga de información puede afectar la confianza de otros procesos que también son delicados”.
Sostuvo que “el tema es muy serio y tiene la total y completa atención de la embajada y del gobierno (estadounidense)”.
“Lo importante para nosotros es investigar qué fue lo que sucedió. Todavía eso no está claro, se está evaluando, primero internamente antes de hacer contacto con la contraparte aquí en El Salvador”, puntualizó.
Las declaraciones las brindó la representante estadounidense luego que la sede diplomática en El Salvador, CEPA y el gobernador de Maryland firmaron un memorándum de entendimiento para fortalecer la relación en materia aeronáuta y aeroportuaria.