Comercio y vecinos afectados por ripio en las orillas de la calleAmpliación de acceso a San Miguel marcha lento

En el proyecto participan tanto MOP como el Fovial, por una inversión que ronda los $2 millones

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Cada noche colocan arena sobre el asfalto, lo que genera polvo porque no riegan lo suficiente y se hace lisa la vía.

Por Francisco Torres comunidades@eldiariodehoy.comFrancisco Torres comunidades@eldiariodehoy.com

2013-12-02 7:00:00

Comerciantes como Wilfredo Ernesto Rivas, administrador de una venta de llantas, saben que cuando la vía termine de ser ampliada habrá un mayor flujo vehicular en la zona.

Esto podría beneficiar a los negocios que están en la entrada norte del municipio.

Sin embargo, mientras eso pasa, los comercios sufren muchos problemas debido a las obras.

Lo que más afecta, según Rivas, es el polvo, porque a menudo empleados del Fovial pasan tirando arena y solo rocían agua una o dos veces al día, lo que no es suficiente para reducir las nubes de polvo.

Otra cosa que les afectó es que debieron retroceder sus negocios, porque antes usaban terrenos ociosos , a las orillas de la calle.

“En nuestro caso tuvimos que invertir en una remodelación y el espacio que nos quedó como parqueo es muy corto; si dejan aceras, no nos dejarán espacio para que los clientes se estacionen”, dijo.

José Gilberto Salgado, propietario de un comedor de la zona cuestiona la lentitud de los trabajos y “la informalidad y desorden en el que están trabajando”.

Lo dice porque es del criterio de que deberían de realizar la ampliación de manera ordenada, “pero lo que hacen es que un día trabajan en un lugar y el siguiente día, dejan eso a medias porque se fueron para otro punto: deberían de ir dejando todo terminado, porque así como van es un desorden”, lamentó.

Además el comerciante sostiene que como Fovial trabaja por las noches, a menudo encuentran rípio o arena en las orillas de la calle, frente a sus negocios.

“Uno tiene que pagar para que quiten eso (el ripio) y lo vayan a botar, eso es algo que quienes están trabajando en la calle, deberían hacer”.

Ambos entrevistados también lamentan que cuando los empleados del Fovial hacen hoyos en el asfalto, a menudo no los tapan, y que eso ya causó pequeños accidentes.

Explican que hace una semana un microbús del transporte colectivo se fue en un boquete y se le explotó una llanta.

Otros, como Gerardo Martínez, que habita en la zona, se queja porque el polvo afecta a toda su familia, sobre todo a los niños.

El problema es tan grave que tanto comerciantes como residentes tienen que salir a regar la calle para tratar de minimizar la polvareda.

Contrario a lo que dicen los comerciantes y habitantes del lugar, las fuentes de Fovial aseguraron que envían a menudo camiones cisterna para que mantengan húmeda la calle y así evitar el polvo.

Las fuentes explicaron que los avances de la obra son del 38 % .

Según Erick Motto, jefe regional del MOP, los trabajos de preparación de la vía están por concluir y solo va quedando la colocación de la nueva carpeta asfáltica, en casi un kilómetro de carretera.

Según Motto, aunque esa es la tarea más voluminosa de la obra de ampliación, es la que se demora menos tiempo.

El jefe regional calcula que cuando empiecen a colocarla, tardarán una o dos semanas. Fovial dice que terminarán esa tarea este mes.Aunque los comerciantes tienen la esperanza de que cuando el Ministerio de Obras Públicas (MOP) y el Fondo de Conservación Vial (Fovial) terminen la ampliación de la entrada norte a la ciudad, sus negocios se verán beneficiados, por ahora lo único que tienen son quejas por la tardanza en las obras.

Y no es para menos. Esos trabajos iniciaron en septiembre y avanzan demasiado lento, según los afectados.

Una muestra de ello es que el viernes Gerson Martínez, titular del MOP, llegó a verificar la finalización de las mejoras que hicieron en el sector conocido como El Triángulo.

Según la información oficial, el MOP tardó tres meses en demoler aproximadamente 40 metros de cordón cuneta y acera, así como la habilitación de un arriate en la intersección de la 12a Calle Poniente y avenida Roosevelt.

Ahí crearon tres nuevas islas, ornamentaron la zona e instalaron 300 vialetas para definir separación de carriles.

Sin embargo, conductores como Neftalí Saravia opinan que las tareas fueron muy lentas. “Un grupo de albañiles habrían hecho eso en tres semanas, pero aquí tardaron meses”, dijo.

Según las fuentes del MOP esas obras se hicieron con personal y recursos propios, por un monto de 59 mil 848 dólares y tardaron tres meses en ejecutarse.

En la zona se amplió un tramo pequeño de la vía en 1.8 metros, para que quienes van sobre la avenida Roosevelt a empalmar con la Ruta Militar, tengan un espacio de giro más amplio.

Además de las labores en El Triángulo, el MOP está realizando la ampliación del puente Hirleman a paso lento, porque según Martínez de no hacerlo así, el tráfico se convertiría en un “cuello de botella”.

Ampliación

Martínez destacó que la inversión que se hace en ese puente es de 120 mil dólares, de los cuales la Asociación de Cañeros de El Salvador, aportó 45 mil.

Según un boletín de la institución, actualmente 15 empleados del MOP hacen trabajos de soldado de vigas de apoyo, de 19.25 metros de largo, que serán la base del puente, para luego construir la loza.

Martínez dijo que las vigas son reutilizadas, pertenecían a un paso a desnivel que demolieron en la capital.

Actualmente la vía tiene 13.25 metros de ancho y la idea es ampliarla 7.5 metros más.

La ampliación permitirá extender a cuatro carriles la arteria y que el paso peatonal tenga 1.25 metros de ancho extra.

Pero son precisamente estos trabajos de ampliación los que tienen molestos a los comerciantes de la zona. (Ver nota aparte).

Es el Fovial el responsable de ampliar aproximadamente un kilómetro del principal acceso a la ciudad de San Miguel.

Según fuentes de esta autónoma, a la fecha se contabiliza un 38 por ciento de avance en la colocación de la nueva carpeta asfáltica y la ampliación y mejoramiento de los hombros en la entrada de la ciudad.

La inversión en este proyecto que esperan concluir este mes, supera los 1.8 millones de dólares.

Fovial también tiene meses trabajando en la zona, pero la mayoría de las obras las realizan por las noches, para no afectar el pesado tráfico de la entrada norte a la ciudad.

En esta parte han demolido aceras, cunetas y estacionamientos que los comerciantes habían construido en los terrenos inutilizados a las orillas de la vía. También tuvieron que mover postes del tendido eléctrico.

Martínez señaló que esta sería la primera de dos etapas, con las que buscan mejorar la fluidez vial en la zona.

El funcionario añadió que la segunda etapa sería la ampliación de toda la avenida Roosevelt, pero aún no tienen fecha para inicio.

Al cuestionarle sobre cómo garantizarán que esta etapa se realice, si a la administración Funes le quedan pocos meses, Martínez aseguró que se pueden dejar diseñados, financiados y adjudicados los trabajos, “para que nadie los detenga”.

Esta misma maniobra aplicaría al puente Hirleman, porque la ampliación que hacen actualmente es provisional.

Martínez argumentó que hay un trabajo para diseñar un puente definitivo, que incluirá otras mejoras a la zona de El Triángulo.

El ministro admitió que en la zona faltarán pasarelas para peatones y que no tiene claro cómo se financiarán.

Explicó que buscarán alianzas con la empresa privada y con la municipalidad, para solventar esas necesidades.

No obstante, el titular del MOP aseguró que no han pensado en la construcción de un paso a desnivel en la zona de El Triángulo, por lo que descartó que esto se incluya en el diseño que según él, hacen en la actualidad.

Martínez señaló que una estructura como esa no es necesaria en el área, porque se puede mejorar el paso solo con la ampliación de la vía.