La maestra Julia Carolina Herrera, ganadora del primer lugar en el concurso Buenas Prácticas Pedagógicas Inclusivas, explicó que su proyecto “Mis vivencias en la escuela funcional” surgió ante la preocupación de que las metodologías regulares que en su escuela se utilizaban para enseñar a los niños no favorecían el aprendizaje.
Herrera, quien labora en la Escuela Especial de Juayúa, Sonsonate, detalló que su metodología está enfocada en formar a los niños en habilidades que le ayuden a la vida, por ejemplo en el aseo personal, planchar, cocinar, el arreglo de recámaras.
La metodología puede usarse en todos los niveles educativos, tanto con niños que tienen necesidades especiales como con los de las escuelas regulares. “Lo que nos llevó a hacer esto fue que (antes) trabajábamos con el programa regular y no nos era funcional porque el niño no pasaba de la primera unidad (de estudios). Entonces tomamos a bien trabajar en todas estas habilidades académicas funcionales”, detalló tras comentar que se busca insertarlos en el mundo laboral de la zona.