Cirujanos rescatan mano de infante quemado con pólvora

El paciente perdió por completo un dedo y sufrió amputación de una parte de dos más. Los especialistas le practicaron una operación estético-funcional a fin de que pueda ocupar la mano para agarrar objetos o escribir.

descripción de la imagen
Los productores de maíz lograron una producción récord en este ciclo de cosecha, debido a las condiciones favorables del clima. foto edh / reuters

Por Yamileth Cáceres nacional@eldiariodehoy.com

2013-12-01 8:00:00

Con la mano izquierda destrozada; así recibieron los cirujanos del hospital Bloom a un niño de 6 años originario de Sonzacate, Sonsonate, hace un mes aproximadamente.

El infante llegó con destrucción completa de huesos, con dedos amputados y exposición de tendones. Se trata del caso más grave de quemadura con pólvora que han recibido en el centro infantil, en lo que va del año.

El paciente se lesionó el miembro cuando le explotó la vara de cohete que sostenía en su miembro superior, según el relato que los familiares dieron a los médicos.

“Agarró el producto y explotó en una manita y ocasionó toda esa destrucción” comentó Patricia de Calderón, jefe del Servicio de Cirugía Plástica de ese centro hospitalario.

El infante fue sometido a varias intervenciones quirúrgicas para poder curar las lesiones, rescatar la mayor parte de la mano y tratar que esta le quedara funcional.

El paciente llegó con amputación de dos dedos, uno desnudado, es decir, sin piel y exposición de tendones y otro fracturado. En general, la mano tenía destrucción completa de huesos, tendones rotos y otras heridas.

Curar y salvar la función de esa mano ha sido una tarea que les ha llevado un poco más de un mes a los especialistas, pero la rehabilitación de ese paciente será de un año aproximadamente.

De Calderón manifestó que en este tipo de casos “lo primero es tratar de salvar la vida del paciente, obviamente no había un compromiso mayor de vida, pero sí del miembro, entonces tratamos de salvar la mano”.

La cirugía para reconstruirle el miembro tardó de cuatro a cinco horas; en ella se busca rescatar cada una de las partes de la mano, reconstruir cada tendón, salvar los huesos evitando que se infecten y luego empezar la rehabilitación.

El infante tenía amputación de parte del meñique y del anular, el dedo medio sin piel, el índice completo y fractura del pulgar. Con la operación se salvó el pulgar completo y se reconstruyeron el resto de los miembros dañados, se colocaron clavos en cuatro de los cinco dedos y se reconstruyó los tendones.

De Calderón explicó que se trató de salvar el dedo medio con un colgajo abdominal, (le cubrieron el área con piel del abdomen), pero no fue posible, se infectó casi un mes después.

“A nosotros lo que nos importa más es salvar la pinza para que el niño pueda agarrar cucharas, escribir y hacer otras cosas, aunque es la mano izquierda hay que rescatarla”, comentó la especialista.

Procedimiento

El paciente fue sometido a una amputación estético-funcional; esto consiste en quitar por completo el hueso que fue destruido (del dedo medio) para que junto al pulgar se vea como una mano normal; de lo contrario le quedaría un espacio en medio de la mano.

“Tiene cuatro dedos, pero se ve bien; si no iba a quedar un gran espacio en medio de los dos”, comentó de Calderón.

El infante estuvo un mes ingresado en el Bloom. Un mes después de la tragedia, la mano del paciente se está recuperando bien, comentó la cirujana.

“Nosotros tratamos de dejar la mano lo más funcional y estético posible, sin necesidad de amputar, pero cuando vienen estos casos, normalmente ya vienen amputados, ya no traen el pedazo de hueso; el pedazo de dedo que le hace falta, eso no se puede reconstruir, pero con lo poco que él trae tratamos de reconstruir”, acotó la cirujana.

En el Bloom, entre octubre y la semana pasada se han atendido cuatro infantes lesionados con pirotécnicos, uno fue ambulatorio.

De Calderón expresó que no existe pólvora segura, que cualquier producto puede originar estragos en los niños.

“El accidente ocurre en un abrir y cerrar de ojos, por travesuras, porque los niños quieren explorar cosas. Es normal en un niño querer hacer las cosas como a escondidas de las personas responsables, por eso tenemos que ayudar a prevenir este tipo de complicaciones”, acotó.

La temporada pasada, entre el 1 de noviembre de 2012 y el de 2 de enero de este año, el ministerio de Salud (Minsal) atendió a 185 personas lesionadas con pólvora, 47 fueron en menores de 10 años.

Hace dos semanas, La ministra de Salud, María Isabel Rodríguez, dijo que los padres no deben dejar a los niños manipular ese producto.

“Se ha demostrado que hasta las estrellitas son capaces de producir lesiones graves”, añadió la funcionaria.

El 29 de octubre, varias instituciones, entre ellas Salud, lanzaron la campaña de prevención de niños quemados, el lema: no existe pólvora segura.

En noviembre, el Minsal registra nueve quemados con pólvora, los últimos, tres personas resultaron lesionadas el miércoles cuando explotaron unos fulminantes dentro de un microbús de la ruta 11.

El resto son tres infantes y dos adultos, estos se quemaron con morteros, silbadores, cohetillos y otro, mientras transitaba por un lugar donde manipulaba pólvora.