Diversos partidos políticos reaccionaron de distinta manera ante el informe de consultoría presentado por la Universidad de Salamanca en la que presentan un diagnóstico del papel de la empresa Alba Petróleos en el país y su influencia en favor del FMLN.
Entre los partidos en contienda, ARENA es quien da más crédito al estudio, al señalar que el mismo coinciden con los planteamientos que el partido tricolor ha emitido a inicios de la campaña proselitista.
Ernesto Muyshondt, vicepresidente de Ideología de ARENA, consideró que en general la empresa de capital venezolano ejerce una “burda injerencia” al “financiar” al partido en el Gobierno.
A juicio del tricolor, la sombrilla de ayuda de la que habla el informe de dicha casa de estudios llegaría hasta dirigentes, militantes y a otros partidos políticos, “porque pudiese que el socio del FMLN en esta campaña, el movimiento Unidad, también esté siendo financiado”.
Muyshondt consideró que la “injerencia” de Alba Petróleos al FMLN es parte de un financiamiento con fondos públicos, ya que hay inversión a través de distintas alcaldías que invirtieron en Enepasa, empresa creada por comunas que gobierna el FMLN y que es socia de Alba Petróleos.
El arenero consideró que Alba ha impulsado prácticas en contra de la libre competencia “que han sido denunciadas por gremiales empresariales”.
Por otra parte, la diputada del FMLN, Jackeline Rivera, aseguró que no conoce el informe de la Universidad de Salamanca, pero señala que Alba Petróleos es una empresa que no busca lucro sino ayudar a los más necesitados.
“Hoy aparece una empresa como Alba con un ejercicio empresarial distinto al que se ha tenido en el país, donde no solo busca el lucro para su empresa sino que ejerce una función social que muy vagamente se ha hecho por el empresariado de El Salvador. Creo que eso de alguna manera crea, genera susceptibilidades y críticas”, consideró la legisladora efemelenista.
Manifestó que la empresa tiene “derecho” de ejercer una labor social en el país. “Que haya empresas que quieren compartir sus ganancias con los más pobres, mal haríamos en quitarlas”, acotó.
Aseguró que no sólo Alba Petróleos podría financiar un partido político, sino otras empresas en el país que, según ella han otorgado fondos a otros institutos políticos en distintos eventos electorales. “Hay otras empresas que financian a partidos políticos. Empresarios que han financiado partidos. Lo que no había antes era una ley que dijera hasta donde una empresa podría dar dinero a un partido”, sostuvo.
Rivera evitó referirse a los hallazgos del estudio, afirmando que son argumentaciones abstractas a partir de las cuales no puede emitirse un juicio jurídico. Y afirmó que fue su partido quien insistió en que no se permitiera el financiamiento de empresas a los partidos políticos durante la campaña proselitista en la ley de partidos.
“Planteamos que los partidos solo recibieran financiamiento de personas naturales y ARENA y los demás partidos dijeron que se pudiera recibir donaciones de empresas”, aseveró.
En el caso del movimiento Unidad, el jefe de bancada, César Funes, aseveró que no ven problema en que empresas se constituyan legalmente en el país, siempre y cuando no tengan injerencia en los partidos.
“Nosotros estamos a favor de que toda empresa pueda hacer negocios respetando las leyes de la República. Pero en lo que no estamos de acuerdo es en que una empresa esté al servicio de un partido político específico”, dijo Funes