En los últimos días, el municipio de Mejicanos ha servido de campo de batalla para las pandillas, sin que hasta ayer las autoridades dieran cuenta de las acciones que podrían ejecutar para reducir y prevenir los hechos delictivos.
Los incidentes violentos más recientes se registraron ayer, cuando un pick up asignado a la alcaldesa de dicho municipio, Juana de Pacas, fue atacado a balazos por desconocidos mientras circulaba en la colonia San Miguel, de la referida localidad.
En el auto iba una concejal que resultó ilesa.
Horas después, un supuesto pandillero, de 22 años, fue asesinado por varios hombres en la comunidad Flor Blanca, a unos metros de la Universidad El Salvador y un colegio.
A estos hechos se suma un tiroteo entre pandilleros de la 18 y policías, quienes frustraron el asesinato de un empleado de la ruta de buses 2C el sábado anterior.
El incidente ocurrió en el punto de buses de la colonia Montreal. Se presume que el ataque, en el que murieron dos mareros, está ligado al cobro de la extorsión a los propietarios de los buses.
Un día después, los empleados de las rutas 2 y 2C iniciaron un paro de labores por temor a nuevos atentados.
La medida ha afectado a cientos de usuarios de ambas rutas, a quienes ayer se les vio aturdidos buscando opciones de transporte.
Al ser consultados sobre el accionar delictivo que tiene agobiados a los residentes de la localidad, el ministro de Justicia, Ricardo Perdomo, y el director de la Policía, Rigoberto Pleités, se limitaron a decir que mientras los empresarios de buses no denuncien a quienes los extorsionan difícilmente la Policía podrá capturarlos.
“Si nosotros no tenemos la información de quiénes están extorsionando a los empresarios, a la Policía se le dificulta capturarlos. Cuando nos han ayudado (denunciando a los delincuentes), los hemos capturado”, manifestó Perdomo.
Pese a que se le insistió a los funcionarios que revelaran qué se haría para enfrentar la criminalidad en el municipio, ellos no respondieron.
Durante un recorrido realizado ayer por la mañana en las principales calles de Mejicanos se detectó escasa presencia policial o militar.
En la zona comercial del municipio, entre el mercado y la alcaldía, algunos lugareños pidieron a las autoridades reforzar la seguridad, ya que son acechados por las maras.
El lunes pasado, un comerciante de verduras fue asesinado frente al mercado y, a pocos metros, el viernes ultimaron al dueño de una tienda, hecho en el que otras tres personas resultaron heridas.