Dos supuestos pandilleros acusados de asesinar a un militar retirado estadounidense y su madre en Santiago Texacuangos, al sur de San Salvador fueron capturados en un operativo policial desarrollado ayer por la madrugada.
Según las investigaciones estos sujetos habrían acabado con la vida de Edwin Geovani Rodríguez Rivera 46 años, un militar retirado de la Armada de los Estados Unidos.
En el ataque también ultimaron a su madre María Teresa Rivera, de 73 años.
De acuerdo con las autoridades, este hecho sucedió el 8 de agosto, en el lugar conocido como el Abarrote, del cantón Joya Grande, en el municipio de Santiago Texacuangos.
Según la Policía, los presuntos implicados en este doble homicidio fueron identificados como José Alberto A. “Cuervo”, Cruz Alberto C. C. “Chamuco”, Julio César R. H. “Garza”, Ricardo R. G. “Coludo” y José Omar S. “Manita”.
En el procedimiento también fueron detenidos Ricardo S. G. “Choco”, Randal Marwick C. R. “Randy” y Alexander Enrique V. G. “Pumba” o “Sierra”.
A estos últimos, la Policía los involucra en el asesinato a tiros de una persona, un hecho ocurrido el pasado 30 de septiembre sobre la calle principal que comunica con la escuela del caserío Amatitan, comunidad Los Guzmanes, del municipio de Panchimalco.
De acuerdo con las investigaciones, la víctima caminaba por el lugar cuando fue rodeada por varios sujetos, a quien le asestaron varios disparo que le segaron la vida.
Las investigaciones señalan que fue Randal quien supuestamente atacó a la víctima y el resto de sujetos le impidieron el paso a la víctima.
Víctima ingería licor
El día de los hechos Rodríguez, quien según la Policía desde muy joven se incorporó al Ejército de Estados Unidos, no pudo defenderse del ataque con un arma que tenía, porque al parecer estaba ingiriendo bebidas alcohólicas.
Las autoridades manifestaron que en el lugar, quedaron varios casquillos de pistola calibre 45 milímetros.
Según autoridades, la víctima tuvo un problema con un marero de la zona, meses antes, a quien golpeó.
No descartan que el sujeto que lo asesinó se habría vengado matándolo a él y a su madre. La Policía desconoce el por qué el exmilitar se metió en problemas con el pandillero.
“A él lo mataron por venganza, a la mamá la asesinaron para que no quedaran testigos”, dijo un investigador.
Consta en las investigaciones que los individuos ya habían intentado asesinarlo hacía unos cuatro meses. Solo que esa vez fallaron.
El militar retirado tenía meses de vivir en el cantón Joya Grande.
Los capturados serán llevados a los tribunales de Santiago Texacuangos para que enfrenten la justicia por estas dos muertes, indicó la Fiscalía.