Un jefe policial destacado en la Delegación de Santa Tecla, identificado como Miguel Ángel D. J., fue detenido a las 2:00 de la madrugada de ayer, en una cervecería situada en la 5a Avenida Sur, en los alrededores del bulevar Nicolás Salume, Santa Ana, señalado de intentar matar a su esposa.
El oficial, sin embargo, no permaneció mucho tiempo en arresto, porque su cónyuge se arrepintió horas después de haber puesto la denuncia: acudió a la delegación para retirarla, negó los cargos y pidió la liberación del jefe policial, según informó la Fiscalía.
Según la cuenta de Facebook “Policía Nacional Civil Sindical”, los hechos sucedieron el sábado por la noche.
El sujeto habría golpeado a su esposa y luego la habría amenazado con el arma de fuego que la institución le ha asignado para brindar seguridad a la ciudadanía: “De hecho, se sabe que el jefe policial apuntó hacia el rostro de su esposa, a quien después de amenazarla golpeó en varias partes del cuerpo”, reza el comunicado de la referida cuenta en la red social.
Los hechos no terminaron en un feminicidio porque la víctima logró escapar en busca de auxilio con sus vecinos.
De acuerdo con los lugareños, el oficial seguía a su esposa visiblemente con el arma de fuego en la cintura, mientras que en una de sus manos, al parecer, llevaba un cuchillo de uso en la cocina.
La Fiscalía informó que el sujeto fue dejado en libertad porque la víctima, llorando, y muy conmovida porque su esposo estaba preso, pidió que lo dejaran en libertad, asegurando que no tenía nada en su contra.
De acuerdo con el Ministerio Público, estos delitos no se persiguen de oficio, sino únicamente con denuncia previa por parte de la ofendida.
“De modo que el oficial regresó a su casa y seguramente se presentó este lunes a ejercer su jefatura en Santa Tecla”, sostuvo la fuente fiscal. El jefe policial está destacado en el Departamento de Operaciones de dicha delegación.
Un testigo manifestó que esta no es la primera vez que este oficial agrede a su esposa, aseguró que en otras ocasiones ha pasado lo mismo.
A juicio del declarante, “el jefe policial se vale del grado o el cargo para marginar a su esposa”.
Según los antecedentes penales de Miguel Ángel D. J. habría maltratado en similares condiciones a otra compañera con quien compartía su vida en 1998, en San Miguel.
Cibernautas condenaron la actitud del jefe y lamentaron que la Policía Nacional Civil muy poco pueda hacer por sancionarlo.
“No creo que la Inspectoría le imponga alguna sanción, lo que harán es cambiarlo de división. Qué lástima, es un enfermo mental”, indicó un agente policial.
Oficiales que afirmaron conocerlo dijeron que se ha desempeñado en otros puestos dentro de la corporación policial, como el 911 y la División Antinarcóticos.