María Lucía Tamayo Cerritos, de 72 años, murió ayer por la mañana al registrarse un ataque armado de pandilleros en contra de un supuesto exmarero frente al mercado municipal de San Martín. En el hecho también murió el presunto expandillero, quien tenía un puesto de venta en las afueras de ese centro comercial.
La señora Tamayo Cerritos también era una vendedora ambulante que tenía su pequeño puesto fuera del mercado y fue alcanzada por varios de los disparos que se supone le hicieron a David Ismael Alvarado Bautista, de 21 años.
El informe policial detalla que Alvarado se dedicaba a vender mercadería variada en las afueras del referido centro comercial.
De repente, dos hombres con pistolas se bajaron de un microbús del servicio colectivo, se dirigieron hacia donde él y de inmediato le hicieron varios disparos.
A raíz del ataque resultó herido Alvarado Bautista, la señora Tamayo Cerritos y otra mujer de unos 40 años; resultaron heridos a raíz del ataque. Alvarado Bautista y la señora Tamayo fueron llevados a la clínica de Fosalud de San Martín, pero murieron en el referido centro por las graves lesiones de bala que recibieron.
A la segunda mujer que resultó lesionada la trasladaron al hospital nacional de San Bartolo, Ilopango, donde se recupera de las heridas, según fuentes policiales.
Además de la versión de que el ataque iba dirigido a Alvarado Bautista, las autoridades policiales manejan también la versión de que un supuesto pandillero que viajaba en un microbús de la Ruta 140 disparó contra el grupo de comerciantes que estaba en el lugar.
La Policía presume que el ataque iba dirigido contra Alvarado. El microbús siguió la marcha y cinco paradas más adelante se bajó el pandillero, según fuentes de la Policía.
Hasta ayer tarde no había registrado ninguna captura de sospechosos del atentado.
La Ruta 140 presta el servicio de transporte desde San Salvador, San Martín y San José Guayabal.
La Policía aseguró que Alvarado Bautista era un pandillero retirado de la mara 18, pero sus familiares negaron esa versión de la Policía al asegurar que nunca había pertenecido a ese tipo de grupos.
En ese sentido, las autoridades policiales suponen que el móvil de la muerte de Alvarado está ligado a las rencillas entre las pandillas.
El ministro de Justicia y Seguridad Pública Ricardo Perdomo ha dicho en reiteradas oportunidades de que el incremento que han tenido los homicidios en los últimos meses obedece a las rencillas entre las pandillas rivales y también a los ataques en contra de expandilleros que se han retirado de esos grupos para dedicarse a alguna actividad laboral.
Hallan cadáveres en Olocuilta
Residentes del municipio de Olocuilta informaron ayer del hallazgo de dos cadáveres que se supone habían sido enterrados a poca profundidad en un terreno cercano al Instituto Nacional de Olocuilta, La Paz.
Los cuerpos se hallaron porque dos perros excavaron en el referido lugar y sacaron algunos partes de los cuerpos.
En otro hecho, un hombre de quien no se proporcionó su nombre fue lesionado ayer por la mañana dentro de su vehículo. El ataque se registró en el kilómetro 15 de la conocida como carretera de Oro en la jurisdicción de Soyapango.
La Policía informó que se desconocía las circunstancias en las que había la víctima había resultado lesionado.
La víctima fue llevada al hospital Nacional Molina Martínez donde se encuentra protegida por la Policía.
Sigue alza de homicidios
Pese a los continuos operativos de la Policía que han terminado en numerosas capturas de pandilleros, los asesinatos tienden a incrementarse en las últimas semanas.
En 24 días de noviembre, la Policía tenía registrados 213 homicidios, lo que refleja un aumento de 82 con respecto al mismo período del año pasado.
Además las cifras anteriores reflejan que nueve personas han sido asesinadas cada día de noviembre.
Desde el uno de enero hasta el 24 de noviembre se contabilizan 2,239 crímenes, según la Policía.
Durante el mismo período del año pasado, tenían registrados 2,377 crímenes.