Aún no pueden reparar carretera

b Proceso judicial por vía a La Unión pasó del tribunal cuarto al primero de lo mercantil

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Los daños en la carretera de San Miguel a La Unión son tan severos que Fovial teme que calle quedará intransitable si no la reparan pronto. foto edh / Archivo

Por Francisco Torres comunidades@eldiariodehoy.com

2013-10-09 7:00:00

SAN MIGUEL. Cuando parecía que un proceso judicial, entrampado desde 2007 en el tribunal cuarto de lo mercantil, de San Salvador, empezaba a caminar, un decreto legislativo de julio de 2013 terminó enviando el caso al tribunal primero de lo mercantil, donde nuevamente está parado.

Se trata de un caso promovido por el Fondo de Conservación Vial (Fovial) en contra de la empresa que construyó la carretera que de San Miguel conduce hacia La Unión.

Entonces la Asamblea Legislativa ordenó que todos los procesos judiciales que se regían por la antigua Ley Procesal, pasaron al Juzgado Primero de lo Mercantil.

Fovial, en ese proceso, exige 14 millones de dólares por daños y perjuicios ya que la vía al poco tiempo de haberse concluido comenzó a deteriorarse rápidamente.

Fuentes de Fovial afirmaron que antes del vencimiento de la garantía del contrato, se “verificó serios y evidentes daños en la obra, por lo que pidió a la empresa una reparación integral de la vía, a través de su aseguradora; pero esta se negó a pagar, por lo que Fovial la demandó judicialmente”.

Ahora en el Fovial temen que la vía sea intransitable, si no la reparan pronto, dicen las fuentes de comunicaciones.

A la vía no le dan mantenimiento desde el año 2004.

El primer paso sustancial que se dio en ese proceso judicial fue en febrero, cuando el tribunal cuarto de lo mercantil pidió a un juez de paz de San Miguel que acompañara a peritos para hacer un levantamiento de los daños.

Entonces la idea de Fovial era que se admitiera un peritaje en el proceso, que se cuantificaran los daños y que luego el juez les autorizara las reparaciones, para que el proceso que se sigue en los tribunales no se viera afectado.

Sin embargo, según las fuentes de Fovial, están a la espera de que el nuevo tribunal conozca el caso y acepte como prueba el informe final del peritaje, que al parecer aun no ha sido analizado.

El Diario de Hoy buscó obtener información sobre cómo avanza este caso en el tribunal, pero las fuentes de comunicaciones del Órgano Judicial dijeron que por tratarse de un caso privado, no era posible obtener esa información.

Quejas constantes

De esta calle, el tramo que está más dañado es el conocido como San Miguel-Sirama y la mayor parte del deterioro está en la jurisdicción del municipio de El Carmen.

Ahí el alcalde Hebert Flores afirma que las quejas de los ciudadanos son constantes y le piden a la comuna que se encargue de las reparaciones.

“El problema es tan serio que a mí me han dado ganas en muchas ocasiones de ir a tirarles cemento a esos hoyos, porque ya han provocado accidentes; hace poco murió un joven del instituto en un accidente por el mal estado de la calle”, afirma el edil.

El alcalde afirma que como los casos mercantiles pueden durar muchos años, Fovial debería de pedir al tribunal encargado que le permita reparar la vía “porque supongo que ya hicieron el valúo de los daños”, sostuvo.

Sin embargo, el problema radica en que aun no se analiza esa prueba pericial presentada por el Fovial, lo que los deja sin las posibilidades de invertir en la vía, al menos de forma inmediata.

En el Fovial han calculado que reparar los daños en ese tramo de calle, que supera los 4 kilómetros, podría costar unos tres millones de dólares.

Sin embargo, mientras más se tarden los tribunales en resolver este escollo, la obra podría seguir deteriorándose, lo que iría aumentando el monto de su reparación.

Fuentes del Fovial sostuvieron, en ocasiones anteriores, que la calle fue inaugurada en 2004 y que para entonces ya se empezaba a arruinar en el tramo San Miguel-Sirama.

Al parecer los daños se produjeron porque los cimientos de la calle no eran adecuados, por tratarse de un suelo arcilloso, lo que permitió que el cemento se agrietara.

Ahora hay boquetes de hasta 30 centímetro de profundidad, que representan un peligro para los automovilistas.

El ministro Gerson Martínez ha dicho que se corre el riesgo de declarar intransitable la carretera.