LA UNIÓN. Un grupo integrado por unas 50 personas del caserío Las Chachas, en el cantón El Jícaro, de la cabecera departamental, se manifestó ayer frente a la alcaldía para solicitar que se elimine la directiva que maneja el proyecto del agua y que fue certificada por la comuna.
Esto porque aseguran están sin el servicio de agua desde hace varias semanas por lo que califican como mal manejo de la directiva que llevó a que les cortaran la energía eléctrica que usan para bombear el agua a las residencias.
Son 225 casas del cantón Las Maderas y 90 de Las Chachas las que están afectadas con el corte del servicio de agua desde hace 25 días, cuando llegaron a cortar la luz eléctrica.
La nueva directiva dio en comodato a la alcaldía el terreno donde está el pozo del proyecto de agua que suple a la comunidad con el servicio, por ello la comuna es la que cobra el servicio de agua.
Ricardo Jiménez, regidor de la comuna unionense, dijo que los únicos que han estado puntual pagando la mensualidad del agua a la alcaldía son los residentes en la comunidad Las Maderas, y con ese dinero han pagando la energía en meses anteriores.
“Los que no quieren pagar los recibos del agua son los habitantes de la comunidad Las Chachas y por ese dinero que falta es que no hemos pagado el servicio de energía”, dijo Jiménez.
La manifestación fue dirigida por Adam y Luis Bolaños, quienes ya han manejado la administración del agua y que ahora no reconocen a la directiva que cedió el pozo a la alcaldía.
Bolaños dijo que “es la tercera protesta que hacemos diciéndole a la alcaldía que esa directiva que ellos certificaron es ilegal porque no cumple con los requisitos de los estatutos”.
Jiménez dijo que hay un convenio de las dos asociaciones comunales del cantón Las Maderas y Las Chachas. Ambas comunidades son beneficiadas, y la directiva de Las Chachas fue la que cedió a la alcaldía el terreno donde está construido el pozo.
Agregó que la nueva estrategia de la alcaldía es crear un comité de agua que esté formado por personas de las dos comunidades que no sean miembros de las directivas actuales, para que administren.
Esta decisión no cae gracia a los líderes comunales y aseguran que hay resistencia de algunas personas de las comunidades. El regidor dijo que de eso depende que el proyecto pueda ser retomado y el servicio restablecido.