Visiblemente molesto reaccionó el abogado Omar Pastor cuando se le cuestionó por qué solo solicitaba la anulación de la candidatura del tricolor Norman Quijano y no la del efemelenista Óscar Ortiz, por considerar que el finiquito que presentaron no tiene validez.
El exmagistrado de cámara pidió ayer al Tribunal Supremo Electoral que revoque la autorización para que Quijano compita por la Presidencia, pues asevera que la Constitución establece que debe presentar finiquito para la inscripción y que lo que presentó es una solvencia, pues tiene aún casos abiertos en la Corte de Cuentas, situación que comparte con Ortiz.
“Bueno, caerá en la misma… a mí no me interesan los partidos políticos, quiero aclararles. Nunca he pertenecido a partido político alguno, nunca he sido asalariado del Frente, nunca, señor…”, dijo Pastor, exaltado.
Pastor, que también es vicepresidente del Instituto de Estudios Jurídicos de El Salvador (IEJES), señaló que en 1997 el TSE no admitió un documento similar al presentado por el tricolor.
Tras interponer su solicitud se le cuestionó quién, a su criterio, sería el candidato que resultaría más afectado con esta petición, a lo que contestó que sería el doctor Quijano.
“No es contra Norman, no es personal, es contra esta disposición porque es totalmente inconstitucional. La disposición dice que para ser candidato debe presentar un finiquito… y finiquito significa solvencia total”, dijo.