El actual concejo municipal ya conoce los informes de auditoría que la Corte de Cuentas realizó al exalcalde, Manuel de Jesús Flores, cuyos hallazgos no fueron esclarecidos por esa administración.
El edil de Quezaltepeque, Carlos Figueroa, aseguró que su concejo no quiso contratar una auditoría particular para determinar el estado en el que encontraban la comuna porque “se iba a ver como algo político”.
Con las auditoría que ha hecho el ente contralor se demuestra que el exconcejo mantenía un desorden en la conducción de la alcaldía, insistió el actual edil.
“Esos análisis y el resultado pueden lindar con delitos”, aseguró Figueroa, quien recalcó que no está acusando de ningún delito al anterior concejo, solo señala los hallazgos de la Corte de Cuentas.
El actual concejo, que se encontraba en reunión el pasado martes, dijo que, a lo mejor, el desorden que dejó la anterior administración lo hicieron sin tener conciencia.
Sin embargo, el exalcalde Manuel de Jesús Flores, expresó que todo lo que les señaló la Corte de Cuentas en las auditoría “son recomendaciones” a los procesos administrativos que realizaban los departamentos contables y financieros y que eran avalados por su concejo.
“¿Qué es lo que hacíamos nosotros cuando nos recomendaban, en el caso de devolver los fondos (de la cuenta Fodes a fondos propios)? Los comenzábamos a devolver”, explicó.
Lo que sí no teme Flores es que se le pueda condenar en juicio de cuentas porque se encuentran dilucidando caso por caso presentando las pruebas que se requieren.
Y a manera de ejemplo, mencionó que existen concejos municipales que aún tienen juicios pendientes desde hace 20 años atrás.
“La Corte puede decir cualquier cosa, pero las cosas no funcionan así”, indicó.
Para Flores, se está en un proceso natural administrativo como le pasa a cualquier gobierno local.
Aseguró que como exconcejo, aunque se les condene, seguirán apelando en las instancias administrativas de la Corte de Cuentas.
Incluso, dijo que los proyectos que está ejecutando el actual concejo municipal de Carlos Figueroa son los que él dejó priorizados antes de abandonar el cargo.