Representantes del Sindicato de Trabajadores del Ministerio de Salud (Sitrasalud), del Sindicato de Enfermeras y del gremio de médicos afirmaron ayer que el lunes próximo podrían reactivar la huelga en el sistema público debido a lo que denominan “medidas de represión” de parte del gobierno.
Silvia Navarrete, secretaria general del Sitrasalud, manifestó que las acciones realizadas por los trabajadores en el marco de la protesta por la demanda del pago del escalafón 2014, tienen como base el Convenio 87 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que ha sido ratificado por el presente gobierno.
Según expuso éste autoriza a las organizaciones sindicales a manifestarse de acuerdo con las decisiones que tomen los trabajadores, como lo hicieron con la marcha.
Navarrete denunció que los directores de algunos centros de salud pusieron cadenas y candados a las puertas para que los empleados no salieran a sumarse a la marcha. También advirtió que denunciarán ante la OIT las acciones que el gobierno ejerce contra los empleados que apoyaron las actividades, eso incluye los descuentos.
La secretaria general del Sitrasalud afirmó que mañana tienen una reunión con la directora de las unidades de salud y Sibasis para abordar las problemática, mientras el viernes lo harán con la Dirección General de Hospitales.
“Nosotros esperamos hasta el viernes. Si el viernes no hay solución, a partir del lunes retomamos las medidas de presión”, declaró Navarrete, quien junto a Evelia González, secretaria general del sindicato de enfermeras, descartó que alguna persona haya fallecido como resultado directo de la huelga, tal como el gobierno lo asegura.
González alegó que cuando se dan suspensiones de labores en el área administrativa y consulta externa, en los hospitales siempre queda abierta la atención en emergencias de tal forma que las personas que llegan delicadas van a esa área y no a consulta externa.
El doctor Milton Brizuela, presidente del Colegio Médico, afirmó que a pesar de la voluntad mostrada por los trabajadores y médicos para levantar la medida, no ven en las autoridades el interés de resolver la problemática.
“Están mostrando una actitud intransigente, de ataque a los trabajadores. Están tratando de amedrentar y que los trabajadores no tengan libertad sindical”, dijo Brizuela.
Aunque él espera que el gobierno cambie la actitud, dijo que si eso no ocurre “lógicamente vamos a respaldar a nuestros colegas que tomen esa decisión”.
La ministra de Salud, María Isabel Rodríguez, afirmó, ayer, que las acciones tomadas por esa institución han sido dictadas por el presidente de la República, Mauricio Funes, tras considerar que se estaba afectando a la población.
“Nosotros hemos sido demasiado blandos. No hemos actuado de acuerdo con lo que (dicta) la ley, todos los acuerdos y compromisos que tiene el país en el campo de las alteraciones y la negación de la salud a la población”, aseguró Rodríguez, tras confirmar que se pidió a los directores que mandaran la lista de personas que obstaculizaron la atención.
La funcionaria, tras explicar que no pueden decir el grado de participación de la huelga en el deceso de una paciente, calificó las palabras de los sindicatos sobre una nueva medida si no cesan los descuentos y denuncias como una “situación de terror, de amenaza”.