Tras 31 años desde su último arribo al país, la visita de dos días que desde el miércoles realiza el presidente de Irlanda, Michael D. Higgins por El Salvador, propició un lazo de hermandad más estrecho entre ambas naciones.
Por la mañana el mandatario irlandés se reunió en privado con el presidente de la República de El Salvador, Mauricio Funes, y tras la firma de un Memorándum de Entendimiento en el que ambos gobernantes fueron testigos de honor, el gobernante salvadoreño condecoró a Higgins con la Orden Nacional José Matías Delgado, en el grado de Gran Cruz Placa de Oro.
“Presidente Higgins: Usted ha sido una voz para El Salvador y para los países de Centroamérica que hoy se esfuerzan por cerrar las heridas que marcaron la vida de nuestra región”, le expresó Funes durante la entrega del reconocimiento.
Funes recordó que en la primera visita de Higgins a El Salvador, este “se convirtió en un auténtico promotor de la paz y del diálogo para poner fin al conflicto armado”.
El mandatario irlandés estimó un honor dicho reconocimiento pues lo consideró “un gesto de respeto, no solamente para el trabajo de los derechos humanos que he llevado a cabo en el pasado, sino también al compromiso de mis connacionales, hombres y mujeres que me han acompañado en este viaje”, dijo.
Por la tarde, el presidente de Irlanda visitó el Palacio Legislativo donde también fue objeto de un reconocimiento y de palabras amistosas por parte de los legisladores.
En dicho acto, Higgins recibió la medalla de la Orden al Mérito 5 de noviembre de 1811 Próceres de la Independencia, por parte del titular de la Asamblea Legislativa, Sigfrido Reyes.
“Mi conexión con El Salvador y su pueblo ha formado mi visión del mundo con aquellas personas que han sufrido y han dado sus vidas”, externó Higgins.