La embajadora de Estados Unidos, Mari Carmen Aponte, y el ministro de Justicia y Seguridad, Ricardo Perdomo, inauguraron ayer las nuevas instalaciones erigidas en la Academia Internacional para el Cumplimiento de la Ley (ILEA, por sus siglas en inglés).
La embajadora Aponte destacó que “la nueva obra es una muestra del esfuerzo que se está realizando de parte de los dos gobiernos para capacitar al personal que buscan enfrentar de forma decisiva los delitos transnacionales”.
“La experiencia nos ha enseñado que uniendo esfuerzos es posible lograr una nueva sociedad. Quiero expresar mi satisfacción por participar en la inauguración de esta obra”, expresó la diplomática.
Después del acto de inauguración, la embajadora Aponte, el ministro Perdomo y otros invitados realizaron un recorrido en los nuevos recintos.
La nueva infraestructura que comprende de una ciudadela simulada para las prácticas de los policías tuvo un costo de 7 millones 69 mil dólares provenientes del gobierno de Estados Unidos.
Esa cantidad de dinero se suma a los más de cinco millones de dólares que costó la primera edificación que se localiza en la zona Antiguo Cuscatlán.
“La nueva construcción es el reflejo de la solidaridad y el interés que hay para combatir delitos como actos de terrorismo, lavado de dinero, delitos transnacionales, trata de personas, crímenes financieros y tráfico de drogas”, afirmó la embajadora.
En la nueva edificación se ha creado una piscina y una área para prácticas tácticas que serán utilizadas para entrenamientos. Todo en un sistema de cámaras de un circuito cerrado. Además se construyó un laboratorio de investigación.
También tendrá un edificio para dormitorios que servirán para albergar a los instructores y participantes extranjeros y nacionales que se encuentren en los cursos.
Además un gimnasio, un área de mantenimiento general y un salón de usos múltiples.
Aponte dijo que la nueva construcción se suma a las cinco academias ILEA que hay en todo el mundo, entre ellas, en Budapest, otra en Tailandia, una más de Botswana y en Nuevo México, Estados Unidos.
La diplomática adelantó que para marzo del próximo año se pretende realizar una construcción de paneles solares que brindarán la energía en todas las instalaciones para minimizar la factura energética de la academia.
La ciudadela será utilizada para los cursos tácticos que sean impartidos por expertos de las agencias estadounidenses como la oficina antidrogas, DEA, y el Buró Federal de Investigaciones, FBI.
El lugar ha sido diseñado con un bar, una tienda, un banco, una joyería, un juzgado, una vivienda, y las calles vehiculares.
Las policías afinarán sus conocimientos de cómo se hace un allanamiento de vivienda, de cómo se arresta a sospechosos que viajan en un vehículo; además del entrenamiento táctico que deben de tener las unidades elites de la Policía.
Desde que se creó la academia en El Salvador, en 2005, este centro de formación ha impartido 139 cursos especializados, 26 programas de Desarrollo Gerencial, cuatro programas de Desarrollo de Liderazgo y se han formado 5 mil 820 aplicadores de justicia entre policías, fiscales y jueces, provenientes de 32 países de América Latina y el Caribe que se supone ahora están mejor capacitados para enfrentar al crimen organizado.
Desde 1996, el gobierno de Estados Unidos comenzó a buscar a un país latinoamericano para poder instalar una academia ILEA, por lo que se decidió por El Salvador por considerarlo como un socio estratégico.
Después de intensas negociaciones entre los gobiernos de El Salvador y Estados Unidos, el acuerdo bilateral que daba vida a la academia ILEA en el país fue ratificado por la Asamblea Legislativa el 30 de noviembre de 2005.