SAN MIGUEL. El interior de la catedral migueleña quiere de muchos cuidados, sobre todo las pareces de las cúpulas, porque el humo de las velas y de los vehículos crea una capa de hollín que ennegrece las paredes, explicó el vicario general de la diócesis, sacerdote Emilio Rivas.
Es por esa razón que cada año, antes de la llegada de las fiestas patronales en honor a la Reina de la Paz, patrona de El Salvador, es necesario remozar el templo.
Generalmente solo pintan los interiores porque el dinero no alcanza para pintar el exterior, aunque le dan retoques modestos.
Para realizar estas mejoras en la pintura y estructura del templo fue creado hace años un comité que se encarga de recaudar fondos.
Hace dos semanas realizaron un turno, donde todo lo recaudado es para las mejoras en el templo máximo de San Miguel.
Pero el clérigo Rivas afirmó que las actividades de recaudación de fondos continuarán porque para el mes de octubre han planificado una rifa y una cena para obtener fondos.
Este año, según el clérigo, les gustaría hacer mejoras más completas porque están celebrando el centenario de la creación de esta diócesis, aunque eso dependerá de los recursos que logren obtener en las actividades benéficas.
Para Paulina Soriano, feligrés, que mejoren la pintura de la catedral es algo muy importante “porque es la casa de la patrona y debe estar muy limpia”, sostuvo.
Ella afirmó que la fe y devoción por la patrona de la República debe materializarse en contribuciones, por muy pequeñas que sean, para mejorar la catedral.
Leonor Machado, otra feligrés, dijo que es importante la labor que hace este comité en cuanto a las mejoras en el templo, y llamó a los católicos de toda la zona oriental a sumarse a este esfuerzo con sus ofrendas.
Rivas dijo que pronto darán fechas de rifa y cena.