LA UNIÓN. Desde ayer, los residentes de la zona costera de Conchagua cuentan oficialmente con una carretera en buenas condiciones.
La vía, que fue inaugurada por el presidente Mauricio Funes, tuvo un costo de 6.8 millones de dólares.
La carretera une cantón El Jagüey con El Tamarindo y el sector conocido como El Embarcadero en la jurisdicción de Conchagua.
Son 12 kilómetros de vía y la población beneficiada es aproximadamente de cuatro mil personas, entre comerciantes de mariscos, transportistas de pasajeros y carga, así como turistas.
Una considerable cantidad de pobladores de los caseríos y cantones del municipio llegó al evento de inauguración de la carretera.
El presidente Funes dijo que con la obra se pretende dar un impulso al desarrollo de la zona costera del municipio y que “desde las bicicletas, pick ups, y buses serán beneficiados, ésta carretera está constituida por tres ejes principales que conecta la Litoral y la zona comercial del territorio”.
Jesús Medina, alcalde de Conchagua, dijo que ésta obra ya estaba aprobada desde 2008 en los préstamos del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
“Fueron 92 millones de dólares de préstamos para las vías, de esos 4.5 millones eran para esta carretera y el resto de remanentes que habían quedado”, aseguró.
Elíu Ayala, director del Fondo de Conservación Vial (Fovial), dijo que antes, en el tramo desde El Jagüey hasta El Tamarindo, los buses tardaban hasta 50 minutos en llegar por lo dañado de la vía.
“Hoy se tardan unos 20 minutos y es una zona reconocida a nivel internacional por su turismo e impacto social”, dijo el funcionario.
Claman por seguridad
Por su parte, José Hernández, un poblador, indicó que “vine a ver la inauguración de la carretera, ha quedado bonita, pero creo que mientras en este lugar a las personas las sigan extorsionando y haya presencia de pandilleros, a los turistas les dará miedo visitarnos”.
La zona costera de Conchagua es una de las consideradas peligrosas por la población, debido al dominio de las pandillas y las extorsiones que se registran.
Incluso, los repartidores de productos comerciales pagan extorsión para poder ingresar a la zona a vender.
Además, los cobradores de empresas comerciales pagan una especie de peaje para hacer su trabajo.
Los pobladores aseguran que quisieran que la Policía realizará más patrullajes y entrara con más mano firme a las clicas que operan en la zona.
Agregaron que una de las principales razones por la que el turismo no termina de desarrollarse en Conchagua, al menos en la costa, es precisamente la delincuencia.
Precio al inicio del acto, muchos criticaron la tardanza con que llegó el presidente Funes y su esposa.
Se sorprendieron al ver que no hubo actos de protocolo, ni siquiera se cantó el Himno Nacional.
Unos dijeron que el discurso se volvió aburrido y que “es lo mismo que escuchamos en radio y televisión nacional”.
Pese a esas molestias, agradecieron el hecho que por fin tienen una vía decente y en buenas condiciones.