Los militares comenzaron a celebrar su día en la madrugada de ayer con una alborada dedicada al Divino Salvador del Mundo, y luego a las 9:15 a.m., partió su desfile desde las Fuentes Beethoven hacia el Parque Cuscatlán.
La gracia de 21 caballos pura sangre y sus elegantes jinetes encabezó el recorrido. Mientras marchaban, los caballos ejecutaron movimientos similares a una danza, que fueron aplaudidos por todos los asistentes.
Once carrozas alusivas a las diferentes unidades militares, entre ellas el Regimiento Militar, la Fuerza Aérea, la Fuerza Naval, el Comando de Ingenieros, entre otros, se sumaron al espectáculo.
Cada unidad militar decoró su carroza con motivos alusivos al trabajo realizado por ellos.
Aviones, helicópteros, una carreta halada por caballos y hasta una lancha fueron parte de los peculiares vehículos en los que también se conducían las reinas de los militares, quienes repartieron dulces a su paso.
Las carrozas hicieron una primera y única parada en la Plaza Las Américas, donde los esperaban autoridades del alto mando militar, entre ellos el ministro de la Defensa Nacional, David Munguía Payés, e invitados de honor.
Luego continuaron hasta el Parque Cuscatlán, donde seguía el festejo.
Exhibiciones y diversión
En el Cuscatlán, el Batallón de Sanidad Militar y el Comando de Fuerzas Especiales dieron demostraciones de sus destrezas militares.
Además, las diferentes unidades de la Fuerza Armada colocaron stands donde se expuso armamento, vehículos, uniformes y más.
“Nos sentimos orgullosos de pertenecer a la gran familia de la Fuerza Armada y es un honor formar parte de esta fiesta”, expresó el coronel Jorge Miranda, jefe del Conjunto Cinco de la Fuerza Armada.
La exposición de utilería militar fue el centro de atracción de los centenares de visitantes, que una vez más colmaron el Parque Cuscatlán para gozar de las actividades recreativas ahí presentes.
La exposición de armamento y de equipo fue montada de manera simultánea en el centro comercial Metrocentro, con el objetivo de que más gente conociera el trabajo de las Fuerzas Armadas del país.
Los niños fueron quienes más gozaron de la actividad, ya que en el parque también fueron instalados juegos propios para ellos, como una carrera de obstáculos y un rapel, entre otros.
Durante todo el domingo, familias completas visitaron las exhibiciones y se tomaron fotografías junto a enormes tanquetas; observaron las rutinas de combate y conocieron de cerca el duro entrenamiento que reciben las brigadas de rescate, entre otros.
El desfile de carrozas formó parte de las actividades dedicadas al Día del Militar, aunque en esta oportunidad no gozó del colorido y la afluencia de otros años, los militares se sentían orgullosos de celebrar su día.
“Me gusta participar en esta actividad, lo he hecho como cinco años y se siente una gran satisfacción que la gente sepa lo que hacemos para proteger el país”, dijo Marcelino Castellanos, del Regimiento de Caballería y con 28 años de pertenecer a la institución.