SAN MIGUEL. Tras la alerta naranja decretada para el volcán Chaparrastique, por los riesgos de deslaves, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) informó que han instalado equipos para medir las precipitaciones en la zona alta del volcán.
Este permitirá mejorar la alerta temprana hacia la población cuando se registren lluvias tan fuertes que puedan ocasionar una desgracia, por los deslizamientos.
Además destacan que su equipo de técnicos ha realizado inspecciones periódicas para evaluar el estado de los drenajes, las obras de protección y los respectivos volúmenes de material movilizados por los flujos de escombros.
En esas inspecciones han identificado varias cárcavas en el cono volcánico y restos de suelos y rocas que han sido transportados por deslaves recientes en la zona noroeste del cono.
Precisaron que los deslaves y las cárcavas se deben a a la poca cobertura vegetal que presenta el volcán después del incendio que afecto esta zona a inicios del año y lo grave del caso es que aseguran que los deslaves probablemente continuarán ocurriendo en lo que resta del invierno.
Aunque el gobernador interino, Evaristo Romero, descartó que vulcanólogos del MARN realizarían un estudio en el Chaparrastique, fuentes de la unidad de comunicaciones del MARN dijeron a EDH que el recorrido sí se realizó, el día ocho de agosto.
Eso a petición de la comisión departamental de Protección Civil, que es presidida por Romero, luego de recibir varias alertas de vecinos por la supuesta expulsión de ceniza y el presunto aumento en la emisión de azufre, a inicios de este mes.
El MARN informó que de acuerdo con las mediciones hechas por los expertos se descartó cambios en el nivel de actividad y descartaron que haya expulsado ceniza.