LA LIBERTAD. El sonido de los cohetes de vara rompe el silencio del amanecer en las poblaciones de Cuisnahuat, en Sonsonate, y Jayaque, en La Libertad.
Se trata de la “Topa de los Cumpas”, una colorida expresión de compadrazgo entre ambas poblaciones, que tienen como patronos a San Lucas, en Cuisnahuat, y San Cristóbal, en Jayaque.
Todos los años, cada 22 de julio, los feligreses se reúnen para celebrar la visita de ambos “compadres”. Este año la travesía inició el lunes pasado en Cuisnahuat, luego la procesión pasó la noche en Tepecoyo y finalizó el trayecto ayer al mediodía en Jayaque.
En el recorrido participan niños, jóvenes y personas de la tercera edad, como Domingo Flores, de 88 años, quien desde que tenía 12 años ha participado en esta celebración y es uno de los encargados de amenizar la caravana al ritmo de un tambor.
En el recorrido, las imágenes de los “cumpas” son cargadas en hombros hasta llegar a su destino final, mientras los feligreses entonan cantos y oraciones a los santos.
Al llegar a Tepecoyo, fueron recibidos por los fieles católicos, autoridades del pueblo y la imagen del patrono local, San Esteban Protomártir, junto a la imagen de San Antonio. En este lugar, los fieles pasaron la noche.
Ayer, en horas de la madrugada iniciaron la peregrinación hasta llegar a la entrada de Jayaque, donde fueron recibidos por la cofradía de San Cristóbal.
Ahí, las imágenes de los santos se colocaron en pequeños altares, que son adornados con algodón y ramas de ruda.
Mientras esto ocurre, las cofradías de cada pueblo se colocaron en fila para realizar el encuentro conocido como la “Topa de los Cumpas”, donde realizan un saludo fraternal.
Luego la imagen de San Cristóbal, patrono de Jayaque, se adelanta a la parroquia de la localidad para recibir a San Lucas con un gesto similar al que realizaron los “Cumpas.”
La celebración terminó en la parroquia San Cristóbal, donde se llevó a cabo una misa que marcó el final de la actividad que año con año atrae a cientos de fieles católicos y turistas.
En los descansos, los asistentes a la actividad se refrescan, toman chicha y disfrutan diferentes platillos típicos.