La Fiscalía General descartó ayer que vaya a continuar con la investigación sobre el caso del niño Waldemar, pese a que pidió al Instituto de Medicina Legal que le practicara una “autopsia detallada” al cuerpo del menor.
El jefe del Ministerio Público, Luis Martínez, explicó que en ningún momento se pidió la autopsia porque se tenían indicios de una posible negligencia médica, sino más bien para evitar que se generaran especulaciones en torno al caso.
“Lo importante era evitar cualquier duda en el manejo en el caso del niño. No tenemos ningún indicio (de negligencia médica), fue para curarnos en salud, fue para evitar malos entendidos, no es de ninguna investigación”, dijo Martínez, quien reiteró que “lo mejor era que Medicina Legal hiciera su evaluación, que hiciera la autopsia; fue más bien de carácter preventivo”.
En ese sentido, Martínez descartó que se vaya a investigar al cuerpo médico que atendió durante los cinco meses que estuvo el niño Waldemar en el hospital Benjamín Bloom ni tampoco a las autoridades de Salud Pública por no existir ningún indicio de una probable negligencia médica en el tratamiento que se le brindó al menor.
El director del Instituto de Medicina Legal, José Miguel Fortín Magaña, dijo la noche del lunes que la Fiscalía había ordenado una “autopsia detallada” del cuerpo del niño. Agregó que se harán nuevos exámenes forenses, cuyos resultados se podrán conocer hasta dentro de dos semanas.
El jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Bloom, Óscar Sánchez, explicó que el niño Waldemar tuvo una asistencia de “alto nivel” y que se le dio “todo lo que necesitó”.
El menor estuvo durante dos semanas en una situación de muerte cerebral debido a una hemorragia intracraneal.