Gobierno dice que no descuidó salud de Waldemar

Presidente niega lo dicho por Medicina Legal

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Los vicentinos pudieron despedir a Waldemar, cuyos restos estuvieron expuestos ayer por la tarde en el parque central. Waldemar será enterrado hoy a las 2:00 p.m. en el Parque Memorial Santa Fe, de San Vicente. Fotos EDH / Douglas Urquilla

Por S.Joma /M. Ramírez nacional@eldiariodehoy.co m

2013-07-24 8:00:00

La ministra de Salud, María Isabel Rodríguez, primero, y luego el presidente Funes sostuvieron ayer que sí contactaron con centros de alto nivel y especialistas de otros países para ver la viabilidad de realizar un trasplante de intestino delgado al niño Waldemar.

Además, reiteraron que ninguno ofrecía garantías de que el proceso fuera exitoso.

“Tuve conocimiento de que se hicieron consultas a varios hospitales de Estados Unidos, se hicieron consultas en Cuba, se hicieron consultas en Argentina, en Colombia y todos eran de la misma opinión que el trasplante no se podía realizar”, aseguró Funes.

El 27 de abril se publicó una nota en la que Salud exponía que no había encontrado un centro que se arriesgara a hacer el trasplante, mientras los padres del niño en esas mismas fechas ya gestionaban con un hospital mexicano para hacer la cirugía. Meses después que Salud informo de algunas posibilidades para realizar la operación.

Las palabras de ambos funcionarios surgieron ayer a raíz de que el director de Medicina Legal, José Miguel Fortín, señalara que el niño de cuatro años necesitó del trasplante desde sus primeros tiempos de hospitalización.

Waldemar, quien murió el lunes, sufrió una lesión en el estómago el 17 de enero, al manipular accidentalmente una pulidora eléctrica.

Esta lesión comprometió casi la totalidad de su intestino delgado y si bien al inicio los médicos le dijeron a los padres que el infante necesitaba un trasplante, el 4 de mayo la ministra Rodríguez lo descartó. Un mes después, Salud dijo que sí era necesario.

Por seis meses los padres de Waldemar, a los que se sumó un equipo de voluntarios, tocaron muchas puertas en busca de los fondos para llevarlo a un centro del extranjero para hacer posible el trasplante.

La gestión llegó hasta la Secretaria de Inclusión Social, dirigida por la esposa del Presidente, donde les respondieron que no se disponía de recursos para ello.

En medio de eso las gestiones de los voluntarios se habían intensificado en busca del dinero que necesitaban para pagar un avión ambulancia y el trasplante.

El organismo del pequeño se fue deteriorando en la medida en que pasaron las semanas, al punto que pasó de sufrir neumonía, una infección generalizada, hasta que le declararon muerte cerebral.

Sin embargo, el presidente Funes manifestó ayer que “los ministros o la ministra (de Salud), como el director del Seguro Social, tenían instrucciones del Presidente de la República de que si no tenían recursos para pagar la operación afuera, íbamos a ver cómo nos arreglábamos de la Presidencia para pagar esa operación”.

Rodríguez aseguró que de un hospital de Misouri, Estados Unidos, ofrecieron hacer el trasplante gratuito y estaban listos, con médicos, fecha y avión para venir, pero “desgraciadamente las complicaciones que este chico tuvo, entre ellas la inicial de la neumonía, la siguiente que fue la hemorragia cerebral masiva, no permitían la movilización de este niño”.

El director de Medicina Legal afirmó que el menor nunca mejoró y sufría desnutrición severa.

Los restos de Waldemar aún están en la torre de San Vicente