SAN MIGUEL. Las necesidades de los 100 ancianos que residen en el asilo San Antonio son grandes, según indicaron las administradoras de la institución.
Las Damas de la Caridad son las que están a cargo de la administración del asilo y aseguran que pasan grandes problemas para poder ofrecer a los ancianos lo necesario en el referido albergue.
Teresa Castillo, miembro de la asociación, sostuvo que “hacemos actividades para recaudar fondos y solventar las necesidades, pero no es suficiente”.
La semana anterior, por ejemplo, realizaron un desayuno y una rifa para poder recaudar fondos.
Castillo agregó que entre las necesidades más grandes están la dotación de pañales para adultos, jabón de baño, entre otros.
El hospicio funciona con un presupuesto de 13 mil dólares, de los cuales el Estado proporciona un poco más de tres mil, el resto lo consiguen las Damas de la Caridad con donaciones o actividades.
“Para nuestra asociación no es fácil poder sobrellevar una carga presupuestaria como esta, por eso invitamos a los hermanos altruistas a que colaboren con los ancianos”.
Agregó que solo de energía eléctrica pagan mensualmente más de dos mil dólares, dinero que les cuesta poder obtenerlo.
“Ya hemos solicitado a la empresa eléctrica que nos proporciona el servicio para que nos subsidie, pero hasta ahora no logramos nada”, indicó Castillo.
La Asociación de Damas de la Caridad anunciaron que seguirán promoviendo actividades en beneficio de los adultos mayores resguardados en el asilo San Antonio e invitan a los migueleños a colaborar con los ancianos que tanto lo necesitan.