Hugo Ernesto Lozano y Merlin Esmeralda Pocasangre, ambos de 18 años, fueron ejecutados la noche del lunes anterior en la casa que habitaban en el cantón Quesera, municipio de Tejutepeque, departamento de Cabañas. El hombre murió al instante, la joven fue trasladada a un centro hospitalario, pero falleció en el camino.
De acuerdo con fuentes policiales de Tejutepeque, Lozano era el cabecilla de la pandilla 18 que desde la colonia La Calavera, en Ilobasco, había llegado a sustituir a sus compinches que recién fueron arrestados.
Lozano tenía un mes de haber salido de prisión preventiva tras ser acusado por un asesinato. Pero ese mes le bastó, según la Policía, para que este volviera a retomar fuerza en las extorsiones a comerciantes del sector y en la venta al menudeo de drogas.
De acuerdo con fuentes de El Diario de Hoy, en la escena del crimen recogieron más de 30 casquillos calibre 5.56 mm utilizados por fusil M-16 y otros similares.
La Policía indicó que el lugar donde ocurrió el ataque es bastante solitario, con casas distantes entre sí, pero se enteraron rápidamente porque la joven no murió de inmediato y alcanzó a hacer una llamada a su madre y a una amiga en la que les dijo que habían matado a Hugo y que le mandaran ayuda porque estaba gravemente herida.
Recién se había metido a la pandilla
De acuerdo con fuentes policiales, Merlin Esmeralda recién había decidido ingresar a la pandilla; de hecho, hacía pocos días que el mismo Hugo le había tatuado su nombre y una mariposa.
De acuerdo con la Policía, la joven tenía pocas semanas de embarazo. Se había quedado viviendo sola en Tejutepeque esperando a que el pandillero saliera de la cárcel, pues su madre y hermanos, un policía entre estos, se mudaron de esa ciudad huyendo del accionar de las pandillas.
Pero ella prefirió quedarse a hacer su vida con el pandillero pese a su minoría de edad. Otras fuentes aseguraron que la joven incluso rechazó la ayuda económica que familiares le ofrecieron para que se fuera a Estados Unidos.
El martes por la noche, varios vecinos de Tejutepeque indicaron que a la velación del cabecilla pandillero habían llegado mareros de varios lugares, incluyendo algunos microbuses con varios de ellos desde Ilobasco, de donde era originario el asesinado.
La pareja, aunque no fue velada en el mismo lugar, fue enterrada ayer por la tarde, en el cementerio de Tejutepeque, municipio que se ha convertido en refugio de pandilleros que han colmado la colonia conocida como “La Hollywood”, señalaron vecinos.
Residentes en Tejutepeque lamentaron la decisión que tomó la adolescente y pidieron a las autoridades implementar programas de rescate a jóvenes, pues como Merlin Esmeralda, hay muchas en esa ciudad, quienes están siendo reclutadas por las pandillas, afirmaron.