Tras asegurar que la familia de Waldermar ha pedido que no se comente el caso, la ministra de Salud, María Isabel Rodríguez, aseguró que un médico extranjero evaluaría los pro y los contra de someter al niño a un trasplante.
La funcionaria explicó que hay dos opinión sobre qué es lo mejor para Waldemar.
Los médicos que sostienen la primera, la que ella califica como “conservadora”, consideran que el niño se puede mantener con alimentación parenteral, “sin la agresión del trasplante. En contraposición, otros opinan es que el trasplante es necesario. “Estoy esperando el informe del especialista”, aseveró.
La familia y quienes los están apoyando esperan las observaciones del especialista extranjero para decidir en qué país podrían operar al niño.
Rodríguez considera que “es bueno analizar las distintas opiniones que se tienen”.
Pero sobre todo la que advierte sobre las complicaciones del trasplante. “No es una operación fácil, ni su evolución garantiza que ese muchacho va a vivir”, afirmó.