SANTA ANA. La fuerte lluvia que cayó la noche del miércoles en la ciudad por un lapso de una hora dejó en evidencia la gravedad del estado en que se encuentra parte de la prolongación de la 14a Avenida Sur, que baja desde la Feria Ganadera hasta la 43a Calle Poniente.
La arteria tiene superficie de tierra y la falta de mantenimiento ha generado que durante la época de invierno se deteriore al punto que cuando llueve, los habitantes de la zona no pueden utilizarla.
Lo grave de la situación es que en uno de los extremos, al sur, no hay una parrilla que cubría una zanja cuyo fin es facilitar el paso del agua.
Mientras que en la parte norte hay agujeros, y la falta de una tapadera de tubería de aguas negras también representa un peligro en caso de que las personas quieran evacuar el lugar.
La noche del miércoles, por ejemplo, el nivel del agua subió cerca de 50 centímetros, cubriendo parte de las paredes de las viviendas.
La fuerza es tal que amenaza con arrastrar a las personas que se arriesgan a salir de sus hogares.
Las personas temen que este tramo de vía se convierta en una barranca, tal y como está la conocida calle El Chupadero. Esta última era la vía de acceso a la ciudad hasta antes de que se construyeran todas las urbanizaciones que existen en la zona.
Sin embargo, cuando los vehículos dejaron de utilizarla, las autoridades de turno ya no le dieron mantenimiento.
Ahora en la calle El Chupadero se han formado enormes precipicios que dificultan su recuperación. Uno de ellos tiene más de 15 metros de profundidad.
Las críticas
Lo irónico en la prolongación de la avenida es que apenas son 200 metros los que están en pésimo estado, ya que el gobierno central, a través de su proyecto “Casa para Todos” pavimentó gran parte de la vía.
Mientras que la alcaldía hizo lo mismo en la 43a Calle Poniente, que es por donde ingresa buena parte de los residentes de la colonia San Luis y que son afectados. Las personas criticaron a la alcaldía porque invirtió $123,000 en dichos trabajos, pero no le construyó cordón cuneta.
Una de las personas afectadas, Claudia de Rivas, explicó que, en enero, durante la inauguración de los trabajos en la 43a Calle Poniente, le advirtieron al alcalde Alfredo Peñate que la pavimentación de esta última sería insuficiente si no mejoraban la prolongación de la avenida.
“Cada vez que llueve, a la alcaldía le toca que venir a limpiar la 43a Calle porque todo el lodo y las piedras van a dar a esa calle”, se quejó.
Agregó que la falta de cordón cuneta en los trabajos realizados por la alcaldía hará que el agua que baja por la avenida levante y deteriore el pavimento.
De Rivas explicó que ayer, tras la tormenta de la noche del miércoles, tardó cerca de 15 minutos en recorrer menos de 100 metros para incorporarse a la calle pavimentada.
El motivo fue la cantidad y el tamaño de las piedras que arrastraron las lluvias, que dificultaban el paso de automotores livianos.
La mujer lamentó que la alcaldía no haya hecho nada aún por mejorar la calle.
Por el contrario, dijo que en agosto se cumplirá un año de que la misma institución se llevó la parrilla que servía de protección de la zanja.
El argumento que dieron en ese entonces fue que la iban a reparar luego de que los camiones con materiales que llegaban al proyecto habitacional del gobierno la dañaran. A la fecha continúan esperando su reposición.
Otro habitante, Adolfo Miranda, dijo que ya han habido personas y vehículos que se han hundido en los agujeros que hay en la calle.
No hay ninguna señalización que indique el riesgo que corren las transeúntes que se animan a caminar por la calle.
La zona fue urbanizada hace aproximadamente 49 años.
A los residentes les parece extraño que ya exista cordón cuneta en ambos lados de la arteria, pero que no esté pavimentada.
En sus alrededores existen instituciones educativas, el Seguro Social, el estadio municipal y negocios de comida, entre otros.
La mayoría de los vehículos accede a dichos sitios a través de la Avenida Fray Felipe de Jesús Moraga Sur, ante la falta de otra alternativa.
Miranda es de la idea de que si las autoridades pavimentaran la prolongación de la avenida, esta serviría para descongestionar la zona, sobre todo en horas pico.
También realizaron el llamado a las empresas e instituciones que funcionan en la zona para unirse y presionar a las autoridades a pavimentar los 200 metros de arteria.
Molesto
Ayer el alcalde santaneco, Alfredo Peñate, reaccionó molesto cuando este rotativo le consultó sobre la situación de la prolongación de la 14a Avenida Sur.
“Ustedes no van a ver y dicen cualquier cosa. Vamos a ver si quedan incomunicados o no. Yo no voy a asumir una responsabilidad que yo no tengo, no me voy a hacer cargo de algo que yo no sé”, reaccionó el edil en tono molesto cuando se le indicó que las personas señalaban que cuando llueve fuerte no pueden salir de sus viviendas.
Peñate dijo, en un primer momento, que iría a ver la situación, junto a este rotativo, pero luego expresó que se buscara a otras personas para que inspeccionaran el lugar.
La gerente de mantenimiento, Beatriz de Delgado, dijo que están a la espera de que les entre material para la elaboración de la parrilla.
“En cuanto que se queden incomunicados, probablemente con la cuestión vehicular porque la parrilla cruza toda la calle. Peatonalmente, no”, dijo.