Exigen confiable transmisión de resultados comicios 2014

Observadores de EDH dicen que TSE debe contratar a una empresa del calibre de la española Indra, que hizo un buen trabajo en los comicios de alcaldes y diputados de 2012

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Los resultados de los comicios en 2012 estuvieron a disposición del público, casi desde el cierre de los centros de votación. La empresa Indra fue la encargada de prestar ese servicio al TSE.

Por José Zometa politica@eldiariodehoy.com

2013-05-22 10:00:00

Un riesgo a la falta de transparencia y de legitimidad en los resultados de las elecciones presidenciales de 2014, advierten los observadores, Salvador Samayoa, Paolo Lüers y Joaquín Samayoa, así como representantes de la sociedad civil, si no se contrata a una empresa experta en la transmisión de los resultados, tal y como lo ha dejado entrever el Tribunal Supremo Electoral (TSE).

Magistrados del máximo organismo electoral del país, entre ellos, el mismo titular, Eugenio Chicas, aseguran que no tienen los fondos suficientes para contratar a una empresa como la española Indra que en 012 hizo esa labor; y ante esa dificultad, analizan contratar a otra empresa que facilite el software y el TSE estará vigilante de la transmisión de los resultados, tanto del 2 de febrero de 2014, como de una potencial segunda vuelta el 11 de marzo de ese mismo año.

En las pasadas elecciones para concejos municipales y diputados, en las que por primera vez los salvadoreños pudieron votar directamente por la fotografía del candidato de su preferencia, al TSE contrató a la española Indra, la cual desplegó un avanzado sistema de transmisión de datos, y los resultados se hicieron públicos casi de inmediato tras el cierre de las urnas y los centros de votación.

No obstante, ahora los magistrados del TSE hacen otras evaluaciones, bajo el argumento de que el Gobierno les redujo sustancialmente el monto del presupuesto para las elecciones presidenciales de 2014. Inicialmente había pedido $44.2 millones, pero el ministro de Hacienda, Carlos Cáceres, solo les avaló $32 millones. Esto ha puesto en alerta a observadores como Salvador Samayoa y Paolo Lüers, así como a representantes de la sociedad civil quienes consideran que se está dando marcha atrás a un proceso que en 2012 mostró avances notables en materia de transmisión de resultados.

“Es increíble que el TSE no pueda contratar por insuficiencia de fondos a la mejor empresa para la transmisión de resultados de las elecciones de 2014. La empresa Indra ya hizo con excelencia el trabajo en 2012, la primera vez que votamos por rostro con listas desbloqueadas. Esto pudo haber ocasionado retrasos graves al TSE en la transmisión de resultados, pero ocurrió exactamente lo contrario: tuvimos los resultados temprano y sin objeciones”, opina Salvador Samayoa.

Paolo Lüers considera que se estaría dando marcha atrás a algo que ya había sido superado y que hasta ya está demostrado que se tuvo buenos resultados.

“Es un retroceso obviamente porque el sistema que usó esa empresa española, era bastante confiable, funcionaba perfectamente bien, daba agilidad y era algo ya probado en otros lugares y aquí. Yo no tengo idea si el Tribunal solo, tenga la capacidad tecnológica de hacerlo. Va a ser menos ágil, me imagino y menos confiable”, manifestó Lüers.

Joaquín Samayoa coincide en esto último, pero añade otra consideración a tomar en cuenta para que no sea el TSE el que haga esta labor, sino una firma confiable y con amplia experiencia.

“Podría generar dudas porque acuérdese que nuestro Tribunal está bastante partidizado, porque aún supuestamente los magistrados que no son puestos por partidos tampoco es que tienen una credibilidad muy grande, en el sentido de su independencia política; está el caso del magistrado Walter Araujo que hay también dudas de a quién responde”, argumentó Joaquín Samayoa.

Añadió que por eso es necesario contratar a una empresa del calibre de Indra.

“Sería en beneficio del proceso electoral y del mismo Tribunal el dejar esta función a una empresa que no tiene ninguna agenda, ningún interés más que hacer un buen trabajo”, dijo Samayoa, quien instó al estado a hacer un esfuerzo para dotar de los recursos necesarios para hacer la contratación.

Credibilidad de TSE

Para estos observadores, la incertidumbre podría verse incrementada si se toma en cuenta la posibilidad de una segunda vuelta, tras una contienda cerrada que se vislumbra entre los candidatos de ARENA, Norman Quijano, Salvador Sánchez Cerén, del FMLN, y Elías Antonio Saca, por el movimiento Unidad.

“Las elecciones de 2014 serán muy cerradas, especialmente en primera vuelta. Por tanto, es vital la prontitud y la credibilidad en el procesamiento y en la transmisión de resultados. De ello depende ni más ni menos la legitimidad del poder y, en consecuencia, la paz social y la estabilidad política del país. En un contexto así, resulta hasta sospechoso que el gobierno, con todo su despilfarro multimillonario, no tenga dinero para contratar a la empresa internacional que daría más credibilidad al proceso”, externó Salvador Samayoa.

“Se crea una gran tensión, cuando no salen los números cualquiera se imagina cualquier ‘chanchullo’. La mejor manera de prevenir esto es dar respuestas rápidas”, consideró el también periodista, Paolo Lüers.

A criterio de Samayoa Indra “es una compañía global de alta tecnología, dedicada a la innovación y a soluciones en servicios de transporte, energía, administración pública, telecomunicaciones y muchas otras áreas, incluyendo soporte técnico a procesos electorales con 100 % de éxito en más de 20 países, entre los que destacan España, Francia, Argentina y Colombia”.

Luis Mario Rodríguez, quien es el director del departamento de estudios políticos de la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades), considera que el TSE está en la libertad de realizar la licitación correspondiente para contratar a la empresa responsable de hacer este importante trabajo, que brinde certidumbre y transparencia a los salvadoreños y a los mismos candidatos.

“La empresa que finalmente resulte ganadora, debe presentar como mínimo una pericia y veteranía semejante a la de aquella que ya probó ser efectiva en los comicios de 2012, no porque exista una exigencia legal, sino para garantizar una labor eficiente similar a la descrita para las elecciones anteriores, apuntó Rodríguez, recientemente en un artículo de opinión.

De no tomarse en cuenta estas recomendaciones, aseguró Rodríguez, podría quedar en entredicho la imagen del mismo organismo electoral.

“Si sucede lo contrario, se arriesgará la credibilidad del TSE y la fácil aceptación del escrutinio final por parte de quien resulte perdedor, sobre todo si la diferencia con el ganador es de unos pocos votos”, planteó Rodríguez.

Días atrás el magistrado del TSE, Fernando Argüello, externó su temor a que se pueda generar dudas si no se toma la mejor decisión para la transmisión de los resultados electorales.