LA UNIÓN. Tomar el control de la administración del servicio de agua potable del caserío Las Chachas, cantón El Jícaro y Las Maderas, le costó a la municipalidad de La Unión, la detención de tres miembros del Cuerpo de Agentes Municipales.
Los arrestados son el comandante del Cuerpo de Agentes Municipales y dos agentes más de la institución. Ayer, Rafael Franco, jefe fiscal de La Unión, confirmó que la acusación contra los tres agentes fue presentada a un juzgado de Paz.
Aseguró que los sujetos serán procesados por fraude procesal, amenazas y disparos al aire.
“Debe quedar claro que a cada detenido se le imputará un delito”, dijo sin precisar quien es responsable de cada ilícito.
Los hechos se remontan al martes, cuando la comuna, representada por Delia Vizcarra, su apoderada legal, acompañada de agentes municipales llegaron al tanque que abastece unas 290 viviendas de la referida comunidad.
La idea era cambiar candados y adueñarse de la administración del servicio.
Para ello, según la Policía, usaron la violencia apoyándose de gas pimienta y dispararon sus armas, pues la comunidad opuso resistencia a la medida de la comuna.
La pelea por manejar el servicio data de enero de 2012, cuando el proyecto fue finalizado y las directivas comunales se enfrentaron por su administración.
Pero fue la alcaldía la que quedó con la facultad para hacerlo después de un acuerdo entre las mismas comunidades; quienes han desistido del acuerdo y buscan revertirlo y que el proyecto llegue a sus manos nuevamente.
El martes anterior, aparentemente, el encargado de manejar el proyecto se negó a obedecer la orden que dio Vizcarra y que ejecutó el CAM de desalojar.
Ante ello, los agentes dispararon y lanzaron gases a los ciudadanos.
Vizcarra aseguró que los agentes dispararon para persuadir a la gente y que nadie les había ordenado hacerlo.
La jurídico de la municipalidad manifestó que antes de proceder al desalojo sostuvieron varias reuniones con las instituciones correspondientes entre ellas la Policía.
Dice que se le solicitó el apoyo a la Policía para tomar el control de la bomba, pero que les respondieron que no les acompañarían.
Marcial Beltrán, oficial de servicio de la Policía, manifestó que al momento de hacer la toma, “de entrada hubo unos disparos, al parecer de parte del personal de los agentes municipales; se tiene como evidencia los vídeos, los testigos”.
Según Beltrán, en esas situaciones quiénes debe disuadir es la Policía Nacional Civil, pero los particulares como el CAM no puede hacerlo.