Jennifer y Jaime, los primeros geofísicos formados en el país

Por hoy solo la Universidad de El Salvador tiene esa carrera

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Jennifer Aguilar y Jaime Hernández, tras recibir los títulos que los acreditan como licenciados en Geofísica. Foto EDH / CortesíaLos dos jóvenes geofísicos formados en el país, junto a excompañeros, sostienen un equipo de medición en una de las visitas de campo como parte de su formación. Foto EDH /

Por Susana Joma En Twitter: @SusanaJoma

2013-05-25 9:00:00

El Salvador por fin cuenta con especialistas en Geofísica formados a nivel local. Se trata de Jennifer Susana Aguilar Vásquez y Jaime Steven Hernández Alfaro.

Estos dos jóvenes, ambos de 22 años, son los primeros graduados de la Licenciatura en Geofísica; una carrera que la Universidad de El Salvador (UES) imparte desde 2006 y a la cual ellos ingresaron en 2008.

Cinco años después, el 25 de abril pasado, recibieron su título de manos de las autoridades universitarias.

Jennifer coronó su carrera con un cum honorífico de 8.5 y Jaime con 9.1. Debido a que tuvieron un alto rendimiento académico, la UES los eximió de presentar trabajos de graduación. No obstante, para aprovechar su potencial y tomar más experiencia, están desarrollando proyectos de investigación.

La Geofísica es la ciencia que se encarga del estudio de la Tierra desde el punto de vista de la Física.

Jennifer, quien estudió la educación básica en los colegios Bilingüe José Adrián Echeverría y Bautista de Soyapango, además de su bachillerato en el Instituto Nacional Francisco Morazán (Inframor), tiene previsto buscar una beca con una institución del extranjero.

Su próximo paso a dar es el de estudiar un postgrado en vulcanología. Esta es un área de la Geofísica que le ha llamado la atención desde que era una niña, según dijo.

Por hoy la joven está inmersa en el desarrollo de su investigación denominada “Aplicación de Métodos Geofísicos en el flanco noroeste del volcán de San Salvador”.

Para llevar adelante su trabajo ha buscado el apoyo de especialistas del Observatorio Ambiental del Ministerio de Medio Ambiente.

Jennifer expresó que con el apoyo de sus padres —Milton Aguilar, quien estudia ingeniería eléctrica y Olga de Aguilar, quien es ama de casa— ha logrado estudiar Inglés y ahora hace lo propio con el Francés.

Estudiar idiomas es parte de un doble objetivo: uno es que se le facilite la lectura de libros de su especialidad, los cuales son editados en esos idiomas; el segundo es estar mejor preparada para lograr una beca. Ella explica que la carrera es muy bonita y ha demandado mucho de su tiempo. Pese a ello, está muy contenta porque sabe que ha dado un salto importante para realizar el sueño de convertirse en licenciada en Geofísica. Un éxito que también es muy celebrado por su familia.

Recuerda que antes de entrar a la universidad se inclinaba por estudiar ingeniería, pero cuando tuvo la oportunidad de conocer el plan de estudio de esa licenciatura se decidió por ella.

“Vi que había materias vinculadas al estudio de fenómenos naturales y, como a mí siempre me gustaba la Matemática y la Física, no vi ningún problema”, comenta.

La nueva profesional considera que es una lástima que en el país no se impulse este campo y que muy pocos jóvenes se interesen por este, pese a que hay volcanes activos. Además, El Salvador está ubicado en una zona de alta sismicidad, pues tiene costa y océano. “En la medida en que más personas estudien esto se va a desarrollar y van a crecer las oportunidades”, externó esta amante del mar.

Por su parte, Jaime Steven Hernández Alfaro, su único compañero de promoción, comparte con ella esa visión y también la aspiración de salir fuera del país a estudiar una especialidad, regresar y aportar a la formación de otros jóvenes en este campo.

Esta esperanza supera el hecho de que en este momento la universidad estatal no tiene capacidad para absorverlos como parte de su planta docente y de investigación, según confirmaron dos de sus profesores.

“Estoy aplicando a (beca para) un postgrado en Ciencias de la Tierra, en la Universidad Autónoma de México (Unam), pero tengo que pasar exámenes y entrevistas”, explicó Jaime, con una sonrisa tímida.

“Yo me iría más por las Ciencias de la Atmósfera . Es lo que más me gusta”, enfatizó sobre la especialidad de su interés.

Aunque la apuesta de Jaime está en la Unam, no deja de lado la posibilidad de irse a estudiar la especialidad que le gusta a Chile o a Japón, países donde le dan prioridad a ese campo de estudios.

Jaime, quien estudió en el Colegio Cristóbal Colón de esta capital, manifestó que Geofísica es una carrera bastante exigente pero muy bonita, porque se estudian muchos contenidos de Física, Matemática y Química.

El joven recién graduado explica que la carrera demanda leer muchos libros sobre Ciencias de la Tierra para encontrarle sentido.

Actualmente trabaja muy de lleno en la investigación a la que ha denominado: “Caracterización de Tormentas Convectivas que afectan al gran San Salvador”.

Su proyecto investigativo también está siendo ejecutado con la colaboración de especialistas en esos campos que laboran en el Observatorio Ambiental.

La idea es identificar cómo se han dado los fenómenos (climáticos) en el pasado, cómo han afectado y cómo se pueden prevenir daños en el futuro, detalló el geofísico.

Al igual que su compañera de promoción, Jaime ha estudiado Inglés, porque le es muy necesario para el campo de la investigación. Sin embargo, también se da su tiempo para distraerse.

Al joven geofísico le gusta ir al campo y visitar pueblitos junto a sus padres Jaime y Flor de Hernández, también con sus amigos.

De igual forma le gusta mucho nadar, aunque según explicó, en los últimos tiempos no ha tenido mucho espacio para ello.

“Mis papás están felices porque somos la primera promoción que se gradúa”, explica el joven quien tiene una hermana que estudia cuarto año de la licenciatura en Física y otra que está en primer año de bachillerato.