Reunión entre Vmt y los transportistas terminó en pelea

Edil de Santa Rosa de Lima fue el protagonista de una gresca

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El edil Jorge Rosales, captado mientras reclamaba airadamente al jefe del Vmt por considerar que lo marginaron. foto edh / francisco torres

Por Francisco Torres comunidades@eldiariodehoy.com

2013-04-25 7:00:00

LA UNIÓN. La reunión de ayer, en la que el Viceministerio de Transporte (Vmt) informaría a los empresarios de buses sobre el funcionamiento del terreno autorizado como terminal, concluyó con un penoso incidente protagonizado por el alcalde de Santa Rosa de Lima, Jorge Rosales.

El edil, sin haber sido convocado, llegó a lanzar insultos y ofensas a los dueños del terreno y contra Gaspar Portillo, jefe regional del Vmt.

Ese es solo un capítulo más de la pugna por esa supuesta terminal, debido a que los empresarios de buses no están de acuerdo con que ese terreno sea usado para tal fin, como lo publicó El Diario de Hoy el miércoles.

Por otra parte los empresarios dueños del terreno y el Vmt tratan de hacer cumplir la aprobación de dicha terminal, mientras que Rosales forcejea para hacerse sentir, alegando que a la comuna la dejaron al margen del plan de ordenamiento que el Vmt asegura tener bajo la manga y diciendo que eso viola la competencia y autonomía de la alcaldía.

En la reunión de ayer, Portillo indicó cómo se pretenden crear las condiciones favorables para que los autobuses tengan acceso fácil al predio, pero los transportistas volvieron a rechazar la idea.

Delis Reyes, presidente de Scoro, gremial de transporte de la zona oriental, argumentó que el predio no tiene sitios donde los usuarios puedan guarecerse del sol o la lluvia, que por estar fuera de la ciudad es peligroso porque podría volverse sitio de asaltos “debido a que ni iluminación adecuada tiene”.

Pero también esbozó argumentos técnicos: “tenemos buses de 12 o 13 metros de largo y las calles son angostas. Aquí la cosa no es solo decir que por esta calle van a pasar los buses, hay que ir a medir”, dijo Reyes.

Un proceso

José Antonio Romero, presidente de Scoil de R.L. dueña de las cuatro manzanas de terreno destinadas para la terminal, admitió que la infraestructura con la que cuentan es mínima, pero señaló que todo obedece a un proceso y no descartó fuertes inversiones a futuro, para mejorar el aparcadero de los vehículos.

Invitó a transportistas a darle el beneficio de la duda a la iniciativa y a asociarse a la terminal, para que también puedan invertir para mejorarla.

No obstante, ante los señalamientos de las escasas condiciones del predio, Portillo señaló que no es la autoridad competente para opinar si el terreno cumple o no con los requisitos mínimos para ser una terminal.

Llamó a los quejosos a usar las instancias que crean convenientes para hacer sentir su malestar. “Hay que ir a las instancias correspondientes a apelar esta resolución”, enfatizó el jefe regional del Vmt.

El terreno en discordia es un predio desolado, en las afueras de la ciudad, a la orilla de una quebrada. Es propiedad de una cooperativa denominada Scoil de R.L. formada por empresarios y comerciantes del municipio.

Sin embargo, solo han balastado el suelo, construyeron una pequeña galera y construyeron un baño y una caseta de seguridad.

Lo que Portillo tiene claro es que la Dirección General de Transporte Terrestre aprobó el sitio como terminal y que a él no le queda más remedio que hacer que los transportistas lo utilicen.

Señaló que en las próximas horas pedirá a la Policía multar a los choferes que desacaten el confinamiento en la terminal y que sigan usando el bulevar Enmanuel para aparcarse.

Pleito político

En la reunión, los ánimos empezaron a caldearse cuando David Amaya, representante jurídico de la alcaldía, intervino para arremeter contra la legalidad del proceso del que salió la designación de terminal para el terreno en mención.

Portillo leyó en varias ocasiones amplios artículos de la ley de transporte, pero los argumentos no convencieron a la comitiva de la comuna, que se hizo presente sin ser convocada, porque afirman que el Vmt no los toma en cuenta.

Pero la cosa empeoró cuando llegó Rosales a la reunión y tomó la palabra.

Señaló a Portillo de tener intereses económicos personales tras la autorización, insinuando posibles sobornos. “Vos le besas la mano a los ricos de Santa Rosa y estás jodiendo a los pobres”, gritó.

En su exabrupto, Rosales dijo que tras el permiso que el Vmt le dio al terreno de Scoil están los intereses del Alba.

“Alba Petróleos financiará la construcción de la terminal en alianza con Scoil”, aseguró Rosales a El Diario de Hoy.

También insultó al excandidato del oficialismo por la alcaldía santarroseña, Rodolfo Umanzor, y acusó a Portillo de “negociar con él este permiso y ese (Umanzor) es el representante de Alba en el municipio”, señaló.

Umanzor dijo que solo es un colaborador de Alba Alimentos, que solo se dedica a gestionar créditos y paquetes agrícolas para los más necesitados y descartó que Alba esté pensando en invertir en esa terminal, aunque aclaró que no representa a esa empresa.

Tras los gritos e insultos inició la gresca. Rosales y Umanzor no se liaron a golpes porque empleados de la alcaldía, empresarios de Scoil y hasta los transportistas lo evitaron.

“Yo me siento abochornado con todo esto. Sobre eso lo único que tengo que decir es que el alcalde es un hombre errado, que ve fantasmas donde no los hay. Está muy equivocado porque está desinformado”, insistió Umanzor.

La sensatez la puso el jefe del Vmt al dar por cerrada la reunión ante los gritos y empujones.

“Eso se salió de control y lo correcto es que terminemos acá la reunión, esto se volvió político”, dijo Gaspar Portillo.

Al final los transportistas, que llegaron con la idea de pedir más tiempo antes de que los obliguen a ingresar a la terminal, se quedaron sin ser escuchados.

El Vmt dijo que esta semana iniciarán las multas.