La fiesta de San José fue una ocasión especial para bendecir una nueva imagen de un Santo Cristo crucificado en la iglesia San José de la Montaña, en la capital.
Esta escultura, obra del salvadoreño Rubén Martínez, fue bendecida luego de la misa del mediodía, ceremonia que fue realizada por monseñor Dieudonné Datonou, encargado de negocios de la Nunciatura Apostólica, y monseñor Jesús Delgado, en presencia de cientos de feligreses, quienes luego del evento pudieron apreciarla y venerarla.
Esta obra está hecha completamente de bronce y su proceso de elaboración tardó aproximadamente cuatro meses, desde el modelado hasta la fundición completa. Está hecha en cuatro lingotes y pesa 700 libras y es una estructura de 1.90 metros de alto.
De acuerdo con monseñor Delgado, fue el primero en este país en poner a un Jesús resucitado al frente del altar, pero sentía que en el templo faltaba el crucificado, el cual según la liturgia tiene que estar cerca del bautisterio.
Azucena de Cruz, una feligrés que llegó a la misa de San José al mediodía, dijo que al ver la imagen le dio una sensación de paz. Describió que en ese momento le pidió por sus hijos y por la salud de ellos.
“Ha sido una gran sorpresa, no tengo palabras. Siento ese rostro tierno del amor con que Él se entregó en la Cruz” , añadió la feligrés.