Tres niños con traumas por accidentes de tránsito permanecen ingresados en el hospital Bloom desde el fin de semana. Una pequeña de siete años es la más delicada.
De acuerdo con el jefe de Residentes de Cirugía del establecimiento, Roberto Trejo, la niña llegó a la emergencia con un golpe en el abdomen y los intestinos por fuera.
La paciente resultó lesionada cuando viajaba en una motocicleta junto a su padre y hermano cuando un vehículo los embistió en la carretera hacia Guazapa.
La niña tenía perforada la parte final del intestino grueso. Ayer los médicos le realizaron una cirugía para repararle el daño. Se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos. Otro de los niños resultó lesionado cuando se cayó del camión en el que viajaba en la carretera hacia Aguilares. Al caer, las llantas le pasaron sobre las piernas.
Trejo comentó que debido al aplastamiento se le fracturaron los miembros inferiores. Se encuentra en el Servicio de Ortopedia, quienes determinarán su manejo.
La otra víctima es una niña de 10 años procedente de San Miguel. La infante fue arrollada, lo que le produjo laceraciones en el abdomen y piernas. Ella está estable.
En lo que va del año, 31 niños han sido atendidos en el Bloom por esta causa. Uno de ellos falleció. La misma cifra se manejaba el año pasado.
El fin de semana también atendieron dos niños mordidos por perros: una niña de cuatro años y uno de siete meses.