Recuperan osamentas en tumbas clandestinas de Zacatecoluca y Soyapango

La Fiscalía busca cadáveres en un predio de donde presume que, el domingo, fueron desenterrados los restos de bachilleres de enfermería En La Paz fueron encontrados los cuerpos de dos personas

descripción de la imagen
Dos cadáveres fueron hallados, ayer, en una finca de la colonia Barcelona, en el kilómetro 54 de la carretera a Zacatecoluca. Llevaban cerca de un año sepultados. Foto EDH / Mauricio Cáceres

Por Diana Escalante Jaime López sucesos@eldiariodehoy.com

2013-02-18 7:50:00

Los cadáveres de personas que estaban extraviadas y que luego fueron asesinadas por agrupaciones de pandilleros siguen apareciendo en cementerios clandestinos de distintos municipios del país.

En una finca de la colonia Barcelona, del cantón Penitente Arriba, en Zacatecoluca, La Paz, fueron desenterradas ayer al mediodía las osamentas de dos personas.

Fuentes del Ministerio Público informaron que por el estado de descomposición de las víctimas presumen que llevaban más de un año de estar sepultadas.

En las tumbas fueron encontrados un zapato y algunas prendas de vestir, sin embargo, estas evidencias no fueron suficientes para que las autoridades determinaran quiénes eran las víctimas ni cómo las mataron.

El personal de la Policía y de la Fiscalía General manifestaron que las excavaciones iniciaron el lunes tras haber sido alertados de que en el lugar habían cuerpos enterrados.

A pocos metros de donde estaban las fosas, los delincuentes habían cavado otros dos agujeros, por lo que no se descartan que ahí pretendían enterrar a otras personas.

Las fuentes señalaron que continuarán trabajando en la zona, porque algunos hundimientos de tierra localizados les hacen sospechar que en el lugar habría otros restos humanos.

La zona donde fue descubierta la escena es totalmente desolada; una propiedad la separa de las colonias Miramar y San Simón, donde hay una fuerte presencia de una pandilla y donde varios habitantes han abandonado o puesto en venta sus casas.

Buscan más cadáveres

El olor putrefacto que emana de un barranco de la colonia Santa Eduviges, en Soyapango, hace suponer a las autoridades que ahí hay un cementerio clandestino.

El criminólogo del Ministerio Público, Israel Ticas, ha excavado el lugar, pues cree que de ese lugar fueron sustraídos los cuerpos de Iris Noemy Martínez y Verónica Lissette Platero, estudiantes del Instituto Nacional San Luis, quienes estaban desaparecidas desde octubre pasado.

Los esqueletos que supuestamente pertenecen a las jóvenes fueron localizados la tarde del domingo en un predio baldío, cerca del puente Las Mulas, en el límite entre Ciudad Delgado y Soyapango.

“Hay mal olor de descomposición de un cuerpo, pero la dimensión (de 50 centímetros de ancho por 90 de largo) es para una fosa múltiple y la existencia de personas va a depender de la profundidad que tenga”, dijo Ticas.

Una llamada anónima alertó a las autoridades sobre que los restos de las estudiantes estuvieron sepultados en esa zona.

Además, en la comunidad Palermo, atrás de la ex-Escuela Militar, en la colonia San Benito, la Policía custodia desde hace unos días un predio en el que existe la posibilidad de que haya otros cadáveres sepultados de forma ilegal.