Presión ciudadana logra liberación de niño plagiado

Menor salvadoreño fue secuestrado en zona fronteriza y luego se lo llevaron a Guatemala

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Una de las primeras actividades es la limpieza de los ríos Colón y San Eugenio. foto edh / cortesía

Por David Marroquín sucesos@eldiariodehoy.com

2013-02-06 7:00:00

La presión que ejerció un grupo de salvadoreños y guatemaltecos residentes en la zona fronteriza entre los dos países logró que los secuestradores de un niño lo dejaran en libertad sin recibir rescate.

El plago del menor de 9 años se registró a finales de enero, en una comunidad cercana a la frontera de Las Chinamas, Ahuachapán.

El niño fue secuestrado por varios hombres armados al ser arrebatado a uno de sus familiares cuando lo llevaban a un centro escolar del sector, según fuentes policiales.

Los familiares del menor denunciaron el plagio a la Policía salvadoreña y el caso fue retomado por la División élite contra el Crimen Organizado (Deco) de la Policía.

Fuentes de la PNC confirmaron que los plagiarios les exigían 300 mil quetzales a los familiares para dejar en libertad a la pequeña víctima. Las investigaciones establecieron que los secuestradores estaban negociando el pago del rescate desde Guatemala, lo que despertó las sospechas de que los plagiarios son guatemaltecos.

Mientras los investigadores hacían su trabajo por localizar a los secuestradores, familiares y vecinos de la víctima se unieron con vecinos de una comunidad en Guatemala y formaron patrullas para ir a buscar al menor secuestrado.

Los vecinos se enteraron de que el niño estaba cautivo en una casa en un sitio de difícil acceso en territorio guatemalteco. Fue así que los pobladores salvadoreños y guatemaltecos, algunos con machete en mano, comenzaron la búsqueda del niño.

Los pobladores recorrieron varios caseríos en las cercanías de la zona fronteriza e iban casa por casa.

Después de dos días de tener secuestrado al niño y al sentir la presión ciudadana, los plagiarios no tuvieron otra alternativa que soltar al menor, quien luego de caminar varios kilómetros pudo llegar sano y salvo a su casa en territorio salvadoreño.

Un investigador de la Policía dijo que, aparentemente, los secuestradores tuvieron miedo de que los pobladores los lincharan por el secuestro del niño, tomando en cuenta los numerosos casos de linchamientos en contra de delincuentes que se han dado en Guatemala.

Las investigaciones que lleva la Deco todavía no terminan, porque han pedido la cooperación de la Policía de Guatemala para poder dar con este grupo de secuestradores.

Una de las preocupaciones que tienen las autoridades salvadoreñas es que secuestradores guatemaltecos estén traspasando las fronteras para venir a plagiar salvadoreños y luego llevarlos a territorio guatemalteco para tenerlos cautivos en zonas montañosas.

Eso se le dificultaría a las autoridades salvadoreños para un eventual rescate porque no podrían pasar a territorio guatemalteco. En ese sentido, las autoridades salvadoreñas se acercarán a sus homólogas de Guatemala para hacer una investigación conjunta.