El informe que mandaron ayer los diputados de la Junta Directiva al Tribunal de Ética Gubernamental (TEG), no justifica cerca de $40,000 en gastos para obsequios navideños que hizo el presidente de la Asamblea Legislativa, Sigfrido Reyes, entre ellos: canastas navideñas, certificados de regalos y licor.
Los únicos acuerdos que los diputados de la Junta Directiva respaldaron en su informe enviado al TEG sobre los regalos son: la compra de brazaletes, prensacorbatas y pulseras que fueron entregadas a los 84 diputados de la Asamblea Legislativa.
Así lo informó ayer el legislador del PCN, Francisco Merino, quien explicó que solo han respondido a los acuerdos que el TEG les pide aclarar, según la denuncia presentada en esa entidad por Transparencia Internacional Capítulo El Salvador.
“La respuesta se refiere a los acuerdos que menciona la denuncia, y esos acuerdos no hablan más allá de un gasto limitado para diversos artículos, de manera que el resto que dice la denuncia no existen los acuerdos”, defendió Merino.
Los “diversos artículos” a que se refiere Merino son los que también la diputada de ARENA, Carmen Elena de Escalón, indicó el lunes pasado que era lo único de lo que existían acuerdos legislativos, estos son: 23 pulseras, 100 prensacorbatas, y corbatas de seda. Según De Escalón, Merino y Guillermo Gallegos, de Gana, eso no superan los $6 mil.
Merino dice que respondieron a peticiones específicas del TEG, y que del resto de gastos deberá hacerse una investigación más amplia.
Ayer se esperaba que Reyes aclarara el destino del resto de las compras en regalos en la conferencia que acostumbra dar después de la reunión del Comité Agenda País que él preside, pero no la convocó.
Según el detalle en gastos (ver recuadro) solo la presidencia del Congreso autorizó más de $20 mil para regalos.
Merino dijo que en el caso de las obras de arte, en el informe admiten que hubo una “falla administrativa”, pues pese a que autorizaron su compra por un monto de $120 mil, la Asamblea no poseía un inventario de las obras adquiridas.
Con los viajes avalados para los diputados directivos, según la denuncia en “primera clase”, Merino dijo que anexaron el reporte de las aerolíneas a las que les han comprado boletos aéreos y que el término “primera clase” no existe, sino el de “Ejecutivo”.