Una persecución de la Policía contra tres hombres que se conducían en un auto, que presumen había sido robado, desembocó en un tiroteo que terminó con los arrestos de los tres sospechosos.
Un investigador de la corporación policial informó que una patrulla de agentes élite de la unidad de emergencias 911 detectó el vehículo en el que viajaban los tres hombres. Señalaron que estos deambulaban “de forma sospechosa” en la colonia Flor Blanca.
Los agentes comenzaron perseguir al auto, placas P 619-969, porque descubrieron que había denuncias de ciudadanos que relacionaban ese vehículo con varios asaltos ocurridos la semana pasada en varias colonias y en el centro de San Salvador.
Al percatarse de la presencia policial, los sujetos se dirigieron a la zona del parque Cuscatlán y luego buscaron la alameda Roosevelt hasta llegar cerca de una agencia bancaria, donde los oficiales le mandaron al conductor que detuviera la marcha, pero este sacó una pistola y comenzó a disparar contra los agentes en lugar de detenerse.
Los policías reaccionaron de forma inmediata y respondieron al fuego haciéndoles disparos a las llantas del automóvil, para evitar que los hombres se escaparan. Sin embargo, los tres ocupantes salieron del auto para tratar de escapar, escondiéndose en algunos negocios o universidades de la zona. Finalmente, fueron arrestados, dos en el lugar de los hechos y otro a unas dos cuadras del sitio.
La Policía informó que los detenidos son José Adalberto Pineda, de 34 años; Edwin Geovany Guerra, de 33; y Carlos Rodríguez Campos, de 37.
Aunque tienen tatuajes en sus cuerpos, estos no son alusivos a las pandillas criminales. Las averiguaciones que haga la Policía establecerán si son o no pandilleros.
Rodríguez Campos era quien manejaba el auto y, según la Policía, se encontraba en libertad condicional con el cumplimiento de medidas sustitutivas a la detención.
“Por el momento, tenemos información de que cometían asaltos a mano armada, utilizaban el vehículo como medio de transporte para la huida”, afirmó un oficial.
Al revisar el interior del automóvil, los agentes encontraron una pistola 380, la cual fue enviada al laboratorio técnico científico de la Policía para establecer si ha sido usada en otros hechos, como homicidios.
Las autoridades policiales sospechan que los detenidos lanzaron al menos dos pistolas durante la persecución, por la cantidad de casquillos que había dentro del carro, según fuentes policiales.
Patrullas en alerta
El jefe de la delegación Centro de la Policía, Ángel Barquero Silva, explicó que todas las patrullas policiales ya habían sido alertadas de la presencia de ese vehículo. Este había sido usado en varios asaltos a peatones y automovilistas, a quienes les habían robado teléfonos celulares, dinero y prendas de valor.
“Creemos que estos individuos son los responsables de otros asaltos que la población ya había denunciado, pero eso se establecerá a través de las investigaciones”, anotó Barquero Silva.
Los detenidos pasaron a la orden de la Fiscalía, donde están preparando la acusación formal por intento de homicidio en contra de los policías y por la portación ilegal de arma de fuego. Además, los investigarán por los robos antes denunciados.