LA UNIÓN. Por las noches, las calles de la colonia Rubio y barrio Las Flores en la cabecera, se vuelven unas auténticas vías fantasma, pues los residentes de esas zonas no salen por miedo a ser asesinados.
En lo que va del año, 20 personas han sido ultimadas en el departamento unionense. En la presente semana han matado a cuatro personas en los municipios de La Unión y Conchagua, argumento más que suficiente para temer salir a las calles.
En el caso de la colonia Rubio, sus habitantes se encierran en las viviendas desde las 5:00 de la tarde, mientras que en barrio Las Flores el encierro inicia una hora después.
Vecinos que residen en la quinta avenida sur, que es el límite entre colonia Rubio y barrio Las Flores, aseguran que prefieren encerrarse a ser víctimas de la ola de asesinatos.
“A partir de esa hora nadie transita por las calles de este lugar porque estamos en un tramo donde ambas pandillas se tiran a morir, solo ellos pueden caminar en horas de la noche”, dijo una ama de casa.
En las colonias Rubio, Santa Rosa, y los barrios Las Flores y San Carlos, con frecuencia se registran balaceras entre ambas pandillas a cualquier hora del día o por la noche. Incluso, la noche del jueves hubo una en el barrio Las Flores, pero no hubo víctimas.
Vecinos que residen en dichas comunidades disputadas por las pandillas, fueron consultados por EDH y aseguran que el temor aumenta cada día.
“Nos preocupa porque ellos se pelean a cualquier lugar, hora y sin importar si por esa disputa resultan personas inocentes asesinadas; esta situación ya se salió del control, consideramos que las pandillas ya se apoderaron del país con esa tregua que en nada está funcionando”, dice uno.
Dirigentes comunales y propietarios de tiendas de la zona del centro de la cabecera y de los barios Las Flores, El Centro y San Carlos, aseguran que la Policía teme patrullar en ciertos sectores de sus comunidades.
Lo aseguran bajo promesa de anonimato, pues sostienen que hay temor a ser asesinados o que les hagan daño a sus familiares.
Pero el temor y los asesinatos no son exclusivos del barrio Las Flores y colonia Rubio. Los homicidios han tocado, además de la cabecera, los municipios de San Alejo, Santa Rosa de Lima y Conchagua.
“Las autoridades saben y no hacen nada”, lamentó una vecina al referirse a las acciones de las pandillas.
Los dirigentes de las comunidades afectadas por la escalada de violencia, esperan que la Policía redoble los patrullajes y la seguridad.
Por su parte, Hugo Padilla, jefe de operaciones de la Policía en La Unión, aseguró que están realizando patrullajes preventivos.
Instó a la población a denunciar personas o acciones sospechosas cerca de sus hogares.
En la presente semana, la cabecera ha sido el escenario de al menos dos asesinatos en barrio Las Flores y barrio El Centro. Mientras que en Conchagua, ayer se registró un doble homicidio.
Son muchos los vecinos que reclaman protección. Los niveles de violencia que padecen en varias zonas, son demasiado altos.