CARACAS. La publicación de entrevista que le realizó el actor Sean Penn a Joaquín El Chapo Guzmán en la revista Rolling Stone ha despertado polémica y se está investigando quiénes participaron del encuentro, el cual habría contado con el apoyo del régimen de Nicolás Maduro.
En el mes de noviembre del año pasado, la Administración para el Control de Drogas (DEA) de EE.UU., según publicó en aquel entonces el diario La Patilla, tenía información precisa del viaje realizado por el cabecilla del cártel de Sinaloa a fines de septiembre de 2015 a Venezuela, mientras era buscado tras su fuga del penal de máxima seguridad del Altiplano.
La entrevista realizada el pasado mes de octubre por Sean Penn, informa el diario ABC de España, contó con la colaboración del general Hugo “el Pollo” Carvajal, exdirector de inteligencia militar del régimen chavista y cónsul durante en Aruba durante el régimen de Nicolás Maduro, acusado de narcotráfico, de vínculos con las FARC y de formar parte del cártel de los Soles, que vende droga al cártel de Sinaloa, controlado por El Chapo.
Carvajal fue detenido el 22 de julio de 2014 en Aruba, debido a una orden de arresto de los EE.UU., por su presunta vinculación con una red de narcotráfico ligada a las FARC. Seis días después, y tras las protestas de Maduro, quien en ese entonces era cónsul, fue liberado por tener inmunidad diplomática y declarado “persona non grata” en los Países Bajos.
El encuentro auspiciado por quien fuera jefe de la Dirección de Inteligencia Militar durante el gobierno de Hugo Chávez desde julio 2004 a diciembre de 2011, se habría llevado a cabo en el resort turístico de Los Ranchos de Chana, en la Isla Margarita, entre Sean Penn y los familiares del capo mexicano. Según ABC, la información parte de alguien de la seguridad venezolana que alertó a las autoridades estadounidenses sobre la presencia de los hijos de El Chapo.
A partir de esa reunión se establecieron los contactos necesarios para que poco después el director de cine pudiera entrevistarse personalmente con Guzmán en las montañas de Sinaloa, en México, donde estaba escondido.
Tras una larga conversación, Penn y Guzmán mantuvieron contacto mediante teléfono encriptado para ampliar declaraciones. El narco deseaba que se realizara una película sobre su vida.
El actor norteamericano, quien contó con la colaboración de la mexicana Kate del Castillo para el encuentro, narró que Alfredo, uno de los hijos del de Guzmán, fue quien los acompañó durante el largo recorrido por la selva hasta dar con la guarida de Guzmán padre.
Penn no se arrepiente del texto que escribió para la revista Rolling Stone y dijo no tener nada que esconder sobre el tema.
“No tengo nada que ocultar” indicó ayer en un breve cruce de correos electrónicos con un reportero de Associated Press al ser preguntado por unas fotos publicadas por la prensa mexicana en las que se le ve junto a Del Castillo, supuestamente antes de tener el encuentro con Guzmán.
Penn no respondió directamente a la pregunta de si consideraba apropiado haber enviado su artículo a Guzmán antes de publicarlo para que el narco diera su visto bueno, tal y como cuenta explícitamente en el artículo.
Al cuestionarle sobre los “muchos golpes” que le estaban llegando por esa forma de proceder escuetamente respondió que “los golpes, los está dando el texto”.
Tampoco habló claro sobre si adoptó las medidas de seguridad necesarias para proteger a su fuente. “Mis aparatos de comunicación no tuvieron nada que ver (en la captura)”.
El actor se autodenominó en el artículo “el hombre más tecnológicamente analfabeto de la tierra” aunque describe cómo cambiaba de teléfonos para garantizar que sus comunicaciones no eran interceptadas y afirma que dejó su celular en Los Angeles cuando acudió a México a ver a Guzmán.
La fiscal general Arely Gómez explicó a Radio Fórmula que tenían conocimiento de esa cita gracias al seguimiento que estaban llevando a cabo de uno de los abogados de Guzmán y que “nos hace estar prácticamente en el lugar de los hechos”.
Al ser preguntada sobre si investigaba a Del Castillo y Penn, ella eludió contestar y solo dijo que se investigan las dos reuniones que el abogado tuvo con ellos y “posibles conductas delictivas que se hayan podido cometer en México”.