WASHINGTON. El Gobierno estadounidense expresó ayer “profunda preocupación” por las detenciones por unas horas de unos 90 disidentes en Cuba, entre ellos un grupo de integrantes del grupo “Damas de Blanco”, e insistió en que continuará trabajando para que se respeten los derechos de manifestación en Cuba.
“Hemos visto los informes, y nuestro personal en la embajada de La Habana ha confirmado estas detenciones”, indicó John Kirby, portavoz del Departamento de Estado, en su rueda de prensa diaria.
Kirby remarcó la “profunda preocupación” del Gobierno estadounidense por estas detenciones.
“Vamos a continuar presionando por los derechos de reunión pacífica, asociación y libertad de expresión, y vamos a seguir expresando nuestro apoyo por la mejoría de las condiciones de derechos humanos y reformas democráticas en Cuba”, agregó.
Estas detenciones se producen apenas unos días antes de que el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, viaje este viernes a La Habana para la formalización de la izada de bandera estadounidense en la embajada en Cuba, abierta el pasado mes, y dentro del proceso de normalización de relaciones diplomáticas entre ambos países que permanecían suspendidas desde hace más de medio siglo.
El portavoz se refirió a las detenciones del pasado domingo de unos 90 disidentes tras manifestarse en un parque de La Habana, algunos portando fotos de presos políticos y otros enmascarados con imágenes del presidente de EE.UU., Barack Obama.
“Él (Obama) tiene la culpa de lo que está pasando (en Cuba), el Gobierno cubano se ha envalentonado con las negociaciones” con Washington, declaró el ex preso político Ángel Moya ante los demás activistas, en la plaza situada frente a la Iglesia, minutos antes de ser arrestados. “Por esto tenemos esta careta, por su culpa”, agregó Moya, marido de la líder de las Damas de Blanco, Berta Soler.
También hizo hincapié en que se presione al Gobierno cubano para que respete la libertad de reunión y la libertad de prensa en el país.
Los opositores Antonio González-Rodiles, su novia Ayler González, y Ángel Santiesteban dijeron que fueron arrestados y conducidos en un carro patrullero a un centro de detenciones luego de reunirse con las “Damas de Blanco”, tras la habitual caminata que ese movimiento femenino realiza los domingos a la salida de misa en una iglesia del barrio habanero de Miramar.
Los tres indicaron que permanecieron detenidos unas horas y que conocían de otros disidentes en igual situación como el caso de Aliuska Gómez, de las “Damas de Blanco”, que ya estaba en libertad.
González Rodiles, que lidera el proyecto independiente Estado de Sats, explicó que portaban las fotos para “señalizar que se ha recrudecido la represión contra los activistas opositores”, como parte de la campaña “Todos marchamos” que han emprendido para abogar por la excarcelación de los presos políticos.
Tras medio siglo de hostilidades, el 20 de julio los dos países restablecieron relaciones diplomáticas plenas y las respectivas secciones de intereses pasaron a ser embajadas, según los términos de un acercamiento histórico anunciado en diciembre entre La Habana y Washington.