EE. UU. y Brasil dan por superada crisis del espionaje

Revelaron una serie de compromisos sobre cambio climático con los que esperan potenciar un acuerdo global.

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elsalvador.com

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2015-06-30 7:00:00

WASHINGTON. La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, aseguró ayer que confía en el mandatario de EE. UU., Barack Obama, y dio por superada la “crisis” provocada en la relación bilateral por las revelaciones sobre el espionaje en Brasil de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA).

“Esta visita supone un relanzamiento de nuestra relación”, afirmó Rousseff después de reunirse con Obama en la Casa Blanca.

El encuentro se da casi dos años después de que Rousseff canceló una inusual visita a Washington después de que se supo que Brasil era blanco de programas de espionaje estadounidense. Las revelaciones hechas por el excontratista de la Agencia Nacional de Seguridad, Edward Snowden, tensaron profundamente las relaciones entre las dos potencias.

Obama, por su parte, aseguró que ha tenido una “excelente” relación con Rousseff desde que ella llegó al poder en 2011.

Además, revelaron una serie de compromisos sobre cambio climático con los que esperan potenciar las negociaciones para lograr un acuerdo global “ambicioso y equilibrado” sobre el asunto en la cumbre de la ONU que se celebrará en diciembre en París.

Obama ha argumentado que el calentamiento planetario podría empeorar las tensiones sociales y la inestabilidad política en todo el mundo, dañando también a Estados Unidos.

En este marco, ambos mandatarios se comprometieron a trabajar para lograr un acuerdo global “ambicioso y equilibrado” sobre cambio climático en la cumbre de la ONU.

Con ese objetivo, Rousseff dijo que presentará en los próximos meses el compromiso de Brasil para reducir las emisiones de carbono, una contribución que será “justa y ambiciosa” y representará “el mayor esfuerzo posible más allá de sus acciones actuales”, según un comunicado conjunto de los dos países.

Ambos mandatarios se comprometieron a que, para 2030, al menos un 20 % de la generación de electricidad en cada uno de sus territorios provendrá de fuentes renovables que no sean energía hidráulica.

Brasil prometió además que reforestará 12 millones de hectáreas de bosques para 2030?.

Por otra parte, Obama subrayó que EE. UU. ve a Brasil como “una potencia global, no regional”, pero al mismo tiempo considera que mantener una alianza con ese país es “un pilar” clave en la relación estadounidense con Latinoamérica.

Además, Obama y Rousseff repasaron la situación política en el continente, incluido en Venezuela, y se comprometieron a “respaldar la democracia y los derechos humanos en toda Latinoamérica”, en palabras del mandatario estadounidense. —AGENCIAS