Todo listo para la reapertura hoy de las embajadas de EE.UU. y Cuba

La bandera de EE.UU. fue retirada en enero de 1961, cuando se rompió relaciones diplomáticas con Cuba en respuesta a las expropiaciones del régimen de Fidel Castro

descripción de la imagen
elsalvador.com

Por Agencias Internacionales

2015-07-19 9:00:00

LA HABANA. Estados Unidos y Cuba formalizarán hoy el restablecimiento de sus relaciones diplomáticas con la reapertura de embajadas en Washington y La Habana, un paso definitivo que deja atrás más de medio siglo de ruptura y desconfianza.
Por primera vez desde 1961, cuando los países rompieron relaciones, la bandera cubana ondeará en la mansión de piedra caliza que, hasta ahora, era la Sección de Intereses de Cuba en Washington.
El canciller cubano, Bruno Rodríguez, oficiará la ceremonia, en la que también se develará una placa con el nuevo estatuto de la legación y se celebrará un acto con unas 500 personas en el centenario edificio, ubicado en línea recta de la Casa Blanca.
El gobierno de EE.UU. estará representado por la subsecretaria de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson -quien encabezó la delegación estadounidense durante seis meses de negociaciones que condujeron al anuncio del 1 de julio sobre la reapertura de embajadas- y Jeffrey DeLaurentis, el jefe de la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana, quien ahora será encargado de negocios.
Rodríguez, el primer canciller cubano en Washington desde 1959, se reunirá luego con su par estadounidense, John Kerry, en la sede del Departamento de Estado, donde también se izará el pabellón cubano.
La bandera de EE.UU. fue retirada en enero de 1961, cuando su entonces presidente, Dwight D. Eisenhower, rompió relaciones diplomáticas con Cuba en respuesta a las expropiaciones del régimen de Fidel Castro.
No fue hasta septiembre de 1977, tras la llegada a la Casa Blanca de Jimmy Carter, el único expresidente estadounidense que ha visitado la Cuba revolucionaria, que se abrió en la Sección de Intereses de EE.UU. en la isla, al amparo de la misión diplomática suiza.
Inicialmente la sección estadounidense, que desarrollaba fundamentalmente servicios consulares, contó con un total de diez funcionarios del Departamento de Estado, más un destacamento de marines para velar por su seguridad, aunque en la actualidad su personal ronda las 360 personas, entre estadounidenses y cubanos.
Las autoridades norteamericanas han dicho que la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana no izará inmediatamente la insignia de las barras y las estrellas, sino que esperará a agosto, para una ceremonia formal que se espera que sea encabezada por Kerry.
No obstante, ya se han perforado agujeros en el exterior del edificio de donde se colgarán letreros traídos desde Estados Unidos y ya se hicieron los arreglos para imprimir nuevas tarjetas de presentación y papeles membretados que leen “Embajada” en lugar de “Sección de Intereses”.
Lo que durante años fue un asta de bandera solitaria fuera del edificio vítreo de seis pisos en el Malecón de La Habana, un boulevard marítimo, fue rehabilitada recientemente, con todo y una calzada repavimentada.
Cada día durante la última semana, los empleados de la sección han colgado en una valla letreros en español escritos a mano donde han hecho la cuenta regresiva, como uno que decía recientemente: “En seis días seremos una embajada”.