Tras fuga de El Chapo, cesan al jefe de Inteligencia de la Policía Federal

MÉXICO. Según medios mexicanos, Ramón Eduardo Pequeño, jefe de la División de Inteligencia de la Policía Federal, fue separado ayer de su cargo por la fuga de Joaquín El Chapo Guzmán  del penal del Altiplano.
Fue cesado de su cargo por orden de Miguel Ángel Osorio Chong, titular de la Secretaría de Gobernación.
Ramón Eduardo Pequeño García tenía a su cargo el monitoreo de las pantallas que están conectadas a las cámaras de seguridad de los Centros Penitenciarios de Máxima Seguridad a Plataforma México que se ubica en el Distrito Federal.
La información fue confirmada por Enrique Galindo Ceballos, comisionado general de la Policía Federal.
Cabe recordar que durante la conferencia del pasado 13 de julio, Osorio Chong anunció el cese del director del penal, Valentín Cárdenas Lerma, la coordinadora nacional de centros federales de readaptación social, así como el titular del Órgano Administrativo Desconcentrado Prevención y Readaptación Social.
Mienstras, Estados Unidos se sumó a la búsqueda de El Chapo y comenzó a intercambiar información con el gobierno de México, con quien acordó acciones para recapturar al jefe del cártel de Sinaloa.
Funcionarios del gobierno federal revelaron que autoridades del Federal Bureau of Investigation (FBI) y de la Drug Enforcement Administration (DEA) ofrecieron apoyo para ubicar al narcotraficante fugado el sábado pasado, ayuda que fue aceptada por su contraparte mexicana, con quien acordaron emprender acciones y trazar una estrategia para reaprehender al criminal.
Autoridades mexicanas y estadounidenses se reunieron ayer en las instalaciones de la Procuraduría General de la República (PGR). El encuentro estuvo presidido por Tomás Zerón de Lucio, director de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), y Gilberto Higuera Bernal, subprocurador de Control Regional, Procedimientos Penales y Amparo de la institución.
Los funcionarios señalaron que durante el encuentro, las autoridades mexicanas compartieron información a detalle de la forma en que el capo sinaloense logró escapar del penal de máxima seguridad del Altiplano, ubicado en Almoloya de Juárez, Estado de México.
Guzmán, señalado como uno de los grandes responsables de la guerra de cárteles del narcotráfico de los últimos años, tiene una veintena de acusaciones en Estados Unidos y juicios por delitos contra la salud en una decena de juzgados mexicanos. 
En EE.UU., tribunales federales de los estados de Arizona, California, Illinois, Texas y Nueva York tienen abiertos desde hace casi dos décadas dos procesos contra El Chapo por tráfico de drogas y lavado de dinero. 
Ayer también se conoció que  3 de los 9 hijos que se le adjudican a El Chapo están en la mira del gobierno de EE.UU. 
Los nombres de Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, nacidos en 1983 y 1986, respectivamente, así como de Ovidio Guzmán López (1990) se encuentran en diversos expedientes judiciales y del Departamento del Tesoro. Los tres chapitos son señalados por actividades relacionadas con tráfico de drogas y lavado de dinero.