Jeb Bush lanza candidatura a presidencia de los EE. UU.

El republicano se convirtió ayer en precandidato y buscará llegar a la Casa Blanca como su padre y su hermano mayor

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elsalvador.com

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2015-06-15 7:00:00

GINEBRA. El exgobernador republicano de Florida Jeb Bush confirmó ayer formalmente en Miami (EE. UU.) su candidatura a la Casa Blanca y aseguró que está listo para “tomar el mando de nuestro futuro una vez más en este país”. En su cartel electoral figura simplemente “Jeb! 2016”.

Cuando en 1994 Jeb Bush se presentó a gobernador de Florida, hacía poco que su padre había perdido las elecciones presidenciales, así que el aspirante prefirió excluir el apellido de su logo de campaña e intentar ser elegido por sus méritos personales. Ahora que se le asocia más a su hermano, el otro presidente Bush, el candidato sigue prefiriendo dejar el apellido a un lado.

“Ninguno de nosotros merece el puesto por su curriculum, por su partido, por su experiencia, por su familia. No es el turno de nadie. Todos deben pasar el examen y no hay favoritos”, dijo ayer.

La pregunta que me formulo, apuntó Bush, es “qué voy a hacer” ante el “mal curso que ha tomado nuestro país. Y he tomado una decisión: voy a ser el candidato a presidente de EE. UU.”, anunció Bush en un acto público celebrado en el Miami Dade College (MDC), una de las mayores universidades públicas del país.

El discurso de Bush, que rezumaba optimismo y confianza, contuvo también un ataque explícito a Washington, que tachó de “capital estática”, frente a una “nación dinámica”, por lo que se comprometió a crear un Gobierno “al lado de la libre empresa y de la gente libre”, de ser elegido presidente.

Un anuncio de candidatura y comentarios que fueron recibidos con vítores e interminables aplausos por las cerca de tres mil personas que abarrotaban el recinto.

Bush dejó traslucir también su intención de convertirse en el candidato presidencial de los hispanos, a los que se dirigió en español, mediado el discurso, para pedirles ayuda y que “trabajen con nosotros por los valores que compartimos y por un gran futuro” que construir para “nosotros y nuestros hijos”.

“Júntense a nuestra causa de oportunidad para todos, a la causa de todos los que aman la libertad y la causa noble de los Estados Unidos de América”, expresó en español ante gritos de “Jeb”, “Jeb” y un mar de carteles donde se leía “Jeb! 2016”.

Tanto su esposa mexicana Columba Garnica como sus hijos y nietos y su madre, Barbara Bush, acompañaron al republicano en el anuncio de su presentación a las presidenciales de EE. UU. de 2016.

El llamamiento a la comunidad hispana tuvo otra vuelta de tuerca en la voz de su hijo George B. Bush, director de la Oficina General de Tierras de Texas, quien, en perfecto español, pidió a los hispanos el voto para su padre”.

“En nuestra familia no solo hablamos español, sino que también sabemos la importancia de la comunidad latina. Tú, hermano hispano, en esta campaña vales muchísimo”, dijo en español apelando al voto hispano, para concluir en inglés: “(Mi padre) va a ser un excelente presidente de Estados Unidos”.

Bush se presentó además como el candidato más cualificado para “arreglar” los problemas con que lidia el país porque, dijo, “ya lo he hecho antes” como gobernador de Florida, al tiempo que expresó su confianza en lograr un crecimiento económico del 4 % y crear 19 millones de nuevos puestos de trabajo.

Relaciones exteriores

Bush aprovechó su discurso para lanzar críticas a la política exterior de Barack Obama.

Fustigó al mandatario por haber dicho que no descartaba visitar Cuba, país con el que inició un acercamiento tras medio siglo de enemistad.

“No necesitamos un turista que vaya a La Habana en apoyo de una Cuba fracasada. Necesitamos un presidente estadounidense que vaya a La Habana en solidaridad con el pueblo cubano libre. Y yo estoy listo para ser ese presidente”, dijo Bush.

Advirtió además que, de ser elegido presidente, utilizará el “poder del veto” para “proteger a los contribuyentes de los gastos innecesarios”.

“Los líderes tienen que pensar en grande. Tenemos un código impositivo lleno de egoístas intereses políticos. Lo que el enjambre de grupos de presión (loby) han hecho, podemos deshacerlo con un sistema mucho más simple, limpiándolo de favores especiales”, expuso el exgobernador.

En ese contexto, se mostró muy descontento con “lo que han hecho organismos federales como el Servicio de Impuestos Internos (IRS), la Agencia de Protección Ambiental (EPA) y una “completa burocracia” traducida en un “exceso de regulación”.

Bush cuestionó también la política exterior de “aversión al riesgo” de la Casa Blanca y afirmó que Obama “está dejando un legado de crisis no contenidas, violencia sin oposición, enemigos sin nombre y amigos indefensos”.

Por ello, prometió “reconstruir nuestras fuerzas armadas y cuidar de nuestras tropas y nuestros veteranos”, además de mantener alianzas “confiables”.

Bush planea ya viajar en los próximos días a los estados de New Hampshire, Iowa y Carolina del Sur.

Otros postulantes le pisan los talones en las encuestas, como el gobernador de Wisconsin, Scott Walker, y el senador de Florida, Marco Rubio, un estadounidense de origen cubano que quiere ser el primer presidente hispano de Estados Unidos.

El que resulte electo probablemente se enfrentará a la exsecretaria de Estado Hillary Clinton, la favorita para obtener la candidatura del lado demócrata. —AGENCIAS