TEGUCIGALPA. Un tribunal de Tegucigalpa ordenó ayer buscar y capturar a siete ciudadanos implicados en un millonario desfalco en el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), informó una fuente judicial.
El juzgado emitió la orden en respuesta a una solicitud del Ministerio Público (Fiscalía), que involucra a estas personas en el desfalco del Seguro Social, dijo a periodistas la portavoz del tribunal, Bárbara Castillo.
Hugo Mejía, René Medina, Donald Velásquez, Lisandro Ponce, todos exfuncionarios del IHSS, y Edgardo Quiroz, son acusados por la Fiscalía hondureña de los delitos de “fraude y violación de los deberes de los funcionarios”, indicó Castillo.
Agregó que el empresario Shucri Kafie Larach y Juan Alberto Madrid son acusados “por el delito de estafa” en perjuicio del IHSS, cuyo exdirector Mario Zelaya está detenido en Tegucigalpa con otros exfuncionarios acusados del millonario saqueo.
El ministro hondureño de Seguridad, Julián Pacheco, por su parte, dijo a periodistas que la Policía está lista para “ejecutar las ordenes de captura” contra los siete hondureños implicados en el caso de corrupción del Seguro Social.
“Vamos a cumplir las órdenes, no importa quién sea, la orden del juez hay que cumplirla”, subrayó Pacheco.
En el desfalco también están implicadas dos modelos, la hondureña Ilsa Vanessa Molina, quien fue detenida en enero pasado en Estados Unidos por entrar ilegalmente en ese país, y la chilena Patricia Ciuffardi, examante del exdirector del Seguro Social, a quien conoció en Santiago de Chile y con quien tiene un hijo.
Las autoridades de Chile no autorizaron la extradición de Ciuffardi solicitada por Honduras para que respondiera en Tegucigalpa sobre el caso, mientras que Molina ha solicitado asilo político a Washington para evitar su deportación.
Caso salpica al presidente
El escándalo de corrupción en el Seguro Social ha salpicado al presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, quien admitió el miércoles que empresarios vinculados al multimillonario desfalco financiaron su campaña política con parte de ese dinero.
“Mi partido (el Partido Nacional) me ha informado que la suma es por unos 147,783 dólares”, dijo Hernández y explicó que fueron 10 cheques.
Hernández afirmó que “los cheques fueron aportados al Partido Nacional por ciertos empresarios, los que son responsables de la situación, no mi partido”, pero al mismo tiempo señaló directamente al actual vicepresidente de su gobierno, Ricardo Álvarez, por aquel entonces presidente del Partido Nacional.
Sin embargo, el mandatario se desligó de la corrupción en el IHSS y pidió a su partido devolver cuanto antes los fondos que recibió del desfalco de la seguridad social.
Hernández ha dicho que las investigaciones deben continuar “caiga quien caiga”.
El presidente ha tenido que reconocer la financiación ilícita de la campaña electoral que lo llevó a la presidencia de Honduras, debido a la presión pública de la ciudadanía. Miles de hondureños se han manifestado en diferentes ciudades del país para pedir su dimisión.
Pero el gobernante ha respondido con un tajante: “No me iré”. Hernández no descarta postularse para la reelección presidencial. Termina en el cargo en 2018. —AGENCIAS.