El gobernador de California Jerry Brown ordenó a las autoridades estatales imponer restricciones obligatorias al consumo de agua por primera vez en la historia, en momentos en que el estado padece una severa sequía.
En una orden ejecutiva emitida el miércoles, Brown ordenó a la junta estatal del agua implementar reducciones en ciudades y pueblos para cortar el uso en 25%.
La medida impactará a residentes, comercios, granjas agrícolas y otros usuarios.
Brown sostiene que la sequía histórica exige medidas sin precedente.
La orden requerirá a las instalaciones universitarias, canchas de golf, cementerios y otros sitios con jardines extensos a reducir el uso del agua y prohibir el riego del césped en las medianeras de las calles públicas.