PANAMÁ. Opositores al régimen cubano y castristas se enfrentaron ayer en Ciudad de Panamá, un incidente en el que cruzaron insultos y también algunos golpes en una actividad previa a la VII Cumbre de las Américas.
El percance se dio en las inmediaciones del Parque Porras, en el centro de la capital y donde están ubicadas las embajadas de Cuba y de España, cuando los anticastristas agrupados en la denominada Alianza de la Resistencia Cubana se preparaban para un acto de homenaje a José Martí.
Los anticastristas fueron rodeados por seguidores del régimen cubano que los acusaban de ser “terroristas”, “miembros de la CIA”, “asesinos”, “cabrones” y “gusanera”.
El forcejeo y los intercambios de golpes se produjeron cuando los castristas exigieron a los miembros de la Resistencia Cubana que abandonaran el lugar.
Agentes de la Policía Nacional de Panamá debieron intervenir para que los hechos no llegaran a más, lo que permitió que el bus en que llegaron los anticastristas siguiera su camino.
La Alianza de la Resistencia Cubana emitió un comunicado en el que denunció que sus miembros fueron “golpeados brutalmente por turbas castristas durante una demostración silente ante el busto de Martí”, asegurando que algunos fueron conducidos a un cuartel de policía en la capital.
Destacaron que a sus atacantes no les importó que hubiera mujeres en el grupo, algunas de las cuales, dijeron, también fueron agredidas.
Añadieron que “el régimen castrista arremetió (también) contra la delegación (de la Alianza) con las acusaciones contra los exiliados y opositores que fueron agredidos”.
La delegación de activistas, constituida por líderes opositores de dentro y fuera de Cuba, anunciaron, por otro lado, que hoy realizarán un foro de unidad en la capital panameña, en vísperas de la Cumbre de las Américas.
Por otra parte, representantes de la disidencia cubana lamentaron ayer el “boicot” del oficialismo al Foro de la Sociedad Civil, con una acción que “daña” la imagen de Cuba y que demuestra que el régimen ni está preparado para el diálogo ni para que nada cambie.
Así dijeron opositores como Manuel Cuesta Morúa, el activista Elizardo Sánchez y Rosa María Payá, tras la protesta que realizó la delegación oficialista cubana antes del inicio ayer de dicho foro por la presencia de disidentes en el evento.
“Los que están tratando de reventar la Cumbre son ellos. Esa turba ha dañado la imagen de Cuba, eso es doloroso. Demuestran que no están preparados para este momento”, afirmó Cuesta Morúa.
Para Elizardo Sánchez, de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), la imagen de la delegación progubernamental ha sido “muy negativa”, y deja en evidencia que “van a mantener la misma crispación de siempre”.
“El gobierno de Cuba sigue metido en el búnker y está dispuesto a meterse aún más”, manifestó. —AGENCIAS.