BOLIVIA. El ministro de Gobierno, Hugo Moldiz, reveló ayer que existen “serias sospechas” de vínculos con el narcotráfico del excomandante de la Policía, Óscar Nina, cuyos familiares fueron aprehendidos por la comisión de los delitos de legitimación de ganancias ilícitas y enriquecimiento ilícito.
El martes, la esposa y dos hijos del excomandante fueron aprehendidos por la Fiscalía de Santa Cruz, que investiga un caso de supuesto delito de legitimación de ganancias ilícitas en el que se encuentran involucradas siete personas, entre ellas el propio Óscar Nina.
La autoridad investiga a siete personas involucradas en este caso, incluido el propio Nina, que no ha sido detenido.
“El Ministerio de Gobierno tiene una causa abierta contra policías involucrados en delitos de narcotráfico. Por eso saludamos la detención de las últimas horas, porque creemos que es una señal clarísima de que no va a haber complicidad de ninguna naturaleza, y la policía está obligada a actuar en consecuencia”, aseveró el ministro.
Moldiz dijo que “desde hace muchos años” existen “serias sospechas” sobre la relación de la familia del exjefe policial con el narco, y lamentó que la investigación se haya dilatado, porque “en la justicia los procesos se estancan”.
Nina dirigió la Policía Boliviana entre enero de 2010 y marzo de 2011. Dejó el cargo 17 días después de que el exjefe antidrogas René Sanabria fuera detenido en Panamá acusado de narcotráfico y luego trasladado a Miami. —AGENCIAS.