Con más sombras que luces el caso del fiscal Nisman

Se espera que los próximos resultados clarifiquen el panorama en torno a esta muerte que conmociona a la Argentina hace ya 7 días.

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elsalvador.com

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2015-01-25 7:00:00

BUENOS AIRES. El caso que mantiene en estado de “shock” a los argentinos cumple una semana con más sombras que luces. Y la gran pregunta, en apariencia sencilla, sigue sin respuesta: “¿Suicidio o asesinato?”.

Los indicios que va desvelando la investigación no han permitido hasta el momento dar por descartada ninguna de las dos hipótesis, y mantienen extraordinariamente abierto un caso con tintes de película.

Nisman apareció muerto de un disparo hace una semana, horas antes de comparecer ante el Congreso para explicar una denuncia contra la presidente Cristina Fernández y su canciller Héctor Timerman por supuestamente encubrir a iraníes acusados de haber participado en un atentado contra una mutual judía en Buenos Aires, en 1994.

La muerte de Nisman se vive como un policial sin testigos y abundantes hipótesis, entre las cuales el “suicidio inducido” parece el más verosímil para el Gobierno, oposición y ciudadanía, pero ¿quién lo instigó?

El viernes las autoridades prohibieron la salida del país de Diego Lagomarsino, un colaborador cercano al fiscal que le prestó el sábado pasado la pistola calibre 22 que lo mató y parece ser la última persona que lo vio con vida.

Según el diario La Nación de ayer, Lagomarsino fue imputado por el delito de cesión ilegítima de arma y será citado a indagatoria.

En esta semana, la fiscal Viviana Fein podría conocer el informe final de las cámaras de seguridad del edificio de Puerto Madero y el registro de la guardia del lugar para saber quiénes visitaron al fiscal en las últimas horas. Se estudian y revisan 160 cámaras de seguridad de la Torre Le Parc.

También será clave el listado de las llamadas que Nisman recibió y las comunicaciones que entabló los días antes de la muerte. A este análisis, se suman las pericias balísticas que la letrada pidió que vuelvan a realizarse ya que, en un principio, no se detectó restos de pólvora en las manos del fiscal.