Al menos 600 menores salvadoreños que ingresaron sin documentación a los Estados Unidos siguen en los centros de detención a la espera de acudir ante un juez quien decidirá si se quedan en ese país o son deportados, informó el lunes la viceministra para salvadoreños en el Exterior, Liduvina Margarín.
“El dato más reciente que hemos obtenido a través de nuestra red consular nos da 600 (niños y niñas) salvadoreños que todavía están esperando audiencia”, dijo la diplomática en entrevista con el Canal 12 de televisión.
Señaló que el número de niños en los centros de detención en Estados Unidos, “fluctúa, porque unos salen y otros entran, (y) ese es el dato que se ha mantenido en los últimos meses”.
La diplomática, que ha encabezado los esfuerzos para ayudar a los menores salvadoreños que ingresaron a Estados Unidos por la frontera sur, afirmó que “no se ha eliminado el flujo de niños hacia Estados Unidos, siguen llegando, pero en menor cantidad”.
Explicó que quienes que llegaron acompañados por sus padres están en un centro de detención, y que “la mayoría de los niños que viajaron solos a EEUU siguen esperando audiencia de precalificación para quedarse”.
El Salvador mantiene una campaña para evitar el éxodo continúo de inmigrantes, pero se estima que más de 300 salvadoreños emigran a Estados Unidos diariamente, aunque no hay cifras exactas de menores de edad debido a que por las estrictas exigencias migratorias las familias prefieren sacarlos por los llamados “puntos ciegos” fronterizos.
Según las autoridades salvadoreñas, la principal causa de la migración de niños es la reunificación familiar, padres y madres que han pagado a los traficantes de personas para que les lleven sus hijos.
Según cifras oficiales, en Estados Unidos viven unos 2,5 millones de salvadoreños. Actualmente hay unos 208.000 registrados en el programa de protección temporal, conocido como TPS, que les permite residir y trabajar en ese país. Se estima viven principalmente en los estados de California, Texas y Washington DC.
Decenas de miles de menores no acompañados fueron detenidos tras ingresar sin autorización a territorio estadounidense en el último año, según la Policía de Aduanas y Protección Fronteriza. La mayoría de los niños procedían de de Honduras, Guatemala y El Salvador.